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Diego Maradona discutió con Juan Sebastián Verón en la mitad del Partido por la Paz auspiciado por el Papa Francisco y terminó jugando con su hijo napolitano Diego Junior.
El Papa había recibido a la delegación de futbolistas por la mañana en Ciudad del Vaticano y agradeciéndoles que el fútbol derive en el "bien para la gente" y por "el ejemplo de humanidad" que harán "para el bien de tanta gente"."He querido venir para saludarlos y agradecerles por el trabajo que harán hoy, porque es un deporte pero también es un trabajo. Es un ejemplo de humanidad, de ayuda, y también un trabajo que será para el bien de tanta gente", señaló el Pontífice a los jugadores que, con el "Diez" y su hijo italiano Maradona Jr incluidos.
"Estoy convencido que hoy no se puede pensar la educación sin el deporte, el deporte es el camino para la educación, el camino de promoción humana, el camino para la madurez, de la persona, de la familia, del país", les expresó Francisco al saludarlos brevemente en la casina Pio IV del Vaticano, sede de la Pontificia Academia de Ciencias.
"Yo les agradezco por esta partido de amistad, porque este es un partido de amistad, Gracias por lo que hacen, por los niños, la paz, la amistad del pueblo. Esto es hacer Paz", finalizó.
El cruce con Verón
Una vez en el estadio Olímpico de Roma, Maradona integró el equipo azul al que se le llamó Encuentro, con Nicolás Burdisso, y Verón el blanco, al que se nombró Paz, junto a Hernán Crespo y Fernando Cavenaghi, cada uno autor de un gol.
Al término del primer tiempo, Verón y Maradona se hablaron, hubo una palmada en el brazo que lució amistosa, pero luego hubo miradas de advertencia y cruces verbales. "Yo no te boludeo, te digo las cosas en la cara", gritó Maradona mientras auxiliares lo contenían en la pista de atletismo del Olímpico para llevarlo al vestuario.
Maradona y Verón habían cruzado declaraciones cuando estalló la crisis institucional en AFA. "Verón me traicionó. Ahora se hace el dirigente. Conmigo no da un paso adelante. Yo no quiero saber nada con él ni con el padre (Juan Ramón)", señaló por entonces Diego. "Cuando tenés una cámara, es fácil decir esas cosas. Distinto es hacerlo frente a frente. Yo no tuve problemas con Maradona, él se ve que sí los tiene conmigo. Maradona habla de traiciones, encima. No sirve nada de lo que dice, no suma", respondió rápidamente Verón.
Ya en el segundo tiempo, Maradona compartió equipo con Diego Junior, el hijo que tuvo con Cristiana Sinagra en los tiempos en que el 10 lucía su fútbol en el olimpo napolitano. El equipo blanco ganó 4-3 y Maradona fue el más buscado para los abrazos de despedida.