Cayó la producción en la mitad de las industrias de la región

El Litoral

Gabriel Rossini - @taperossini

Una de cada dos empresas industriales enfrentaron en el tercer trimestre del año retrocesos de producción en torno al 13,6 por ciento promedio interanual, aunque tuvo un impacto acotado sobre el nivel de empleo que apenas se retrajo el 0,2 por ciento.

De acuerdo al informe del Centro de Estudio del Comportamiento Industrial que depende de la Unión Industrial de Santa Fe, durante los meses de julio, agosto y septiembre la producción fabril regional se contrajo 4,5% en relación a igual período del año anterior. En rigor de verdad, la retracción de la producción manufacturera empezó en el cuatro trimestre de 2013.

Según revela el informe, la Utilización de la Capacidad Instalada, uno de los principales indicadores del nivel de actividad, alcanzó durante el tercer trimestre el 63,8%, un nivel sensiblemente inferior en relación al mismo período del año anterior. “En 2016 -dice el informe- los niveles de capacidad ociosa se encuentran por encima de los registros medios observados desde 2012”.

Según revela el estudio, “el precio medio del principal producto elaborado por las industrias presentó en el tercer trimestre de 2016 un alza de 32,1% en relación a igual período del año anterior, pero levemente inferior al trimestre anterior; en tanto los costos de producción mostraron incrementos del orden de 35,4% interanual; mientras que los ingresos por ventas aumentaron el 26,2 por ciento. Entre los ítems que presentaron los mayores aumentos sobresalen los insumos siderúrgicos, papel, fletes y energía”.

En este contexto, la buena noticia es que el nivel de demanda, considerado a través de la actual de la cartera de pedidos de las industrias de la región mostró en el tercer trimestre de 2016 una leve recomposición respecto al trimestre anterior. “No obstante, cinco de cada diez empresas calificaron de manera decreciente su actual nivel de pedidos mientras que el 23% de las firmas consultadas manifestó una cierta mejora”, indicó.

Las situaciones más problemáticas para las empresas fueron en el tercer trimestre de 2016 la alta presión impositiva (83%), la pérdida de rentabilidad (74%), la inadecuada oferta de financiamiento (71%), la elevada inflación (56%), la competencia desleal (52%), las desventajas respecto de las importaciones (49%) y la caída de la demanda (46%).

Entre los industriales, se mantiene la preocupación por la evolución de las importaciones. Según el informe, mientras aquellas ligadas a la actividad productiva, tales como bienes intermedios, bienes de capital (excepto equipos de transporte) y piezas y accesorios para bienes de capital, muestran caídas en valor, las correspondientes a bienes de consumo y vehículos automotores crecieron.

Expectativas empresarias

“Las expectativas empresariales en materia de nivel de actividad para los próximos seis meses revela dispares situaciones. Mientras que un tercio de las industrias vaticina nuevas caídas de producción, otro segmento de empresas -que representa al 37% del panel-, no espera grandes alteraciones. Adicionalmente, el 29% de las firmas consultadas percibe mejoras de demanda para el futuro inmediato. Estos evaluaciones muestran una leve mejora en cotejo a los últimos dos trimestres, siendo aún alta la porción de industrias con percepción negativa y neutral”, concluye el informe.

Según el relevamiento del Centro de Estudios, para los próximos seis meses una de cada dos empresas no aguarda modificaciones sustanciales en su plantel de trabajadores, pero el 30% de las industrias prevé una reducción.

“En el tercer trimestre de 2016 se percibió una expansión de la franja de industrias con expectativas favorables en materia de incorporación de personal, no obstante, su nivel permanece siendo acotado a solo una de cada cinco compañías. Solo el 8 por ciento planea incorporar personal pero el 9 por ciento piensa en reducirlo; en tanto las previsiones de aumento de las horas extras evolucionaron el 18% y su reducción el 20%.