De la Redacción de El Litoral
El ciclo cerrará su temporada este jueves a las 21. En este último encuentro, participan integrantes y amigos de la Asociación Civil Casa de Los Ayala, organizadora de la propuesta.
De la Redacción de El Litoral
Este jueves 3, a partir las 21, tendrá lugar la última fecha de este año de la Peña de Los Ayala. Será en el Molino Marconetti, donde se realizó desde mayo este ciclo que se generó en torno a la música popular argentina y latinoamericana y tuvo como rasgo sobresaliente la presentación en cada edición de músicos locales y de la región.
En este encuentro, que marcará el final de la Temporada 2016, participarán los integrantes y amigos de la Asociación Civil Casa de Los Ayala organizadora del ciclo, entre los que se encuentran Itatí Barrionuevo, Diego Núñez, Fernando Rossi, Diego Martínez (oriundo de San Carlos Centro) y Alejandra Pautasso; junto a los anfitriones, José y Pablo Ayala, entre otros artistas invitados. Durante la noche, habrá disponible un servicio de buffet a precios accesibles, comida casera y cerveza artesanal. La entrada consiste en un bono contribución de 50 pesos.
Para la velada, los organizadores aguardan un escenario “superpoblado”. Es que es mucha la expectativa que generó el ciclo a lo largo de los meses y todos los que pasaron como invitados ya confirmaron su participación. “El espíritu será el de despedir el año”, anticipó Pablo Ayala, uno de los organizadores. Un año que, recordó el músico, fue complejo en muchos aspectos (desde las dificultades económicas hasta el frío, más intenso que en otros inviernos) pero que igual dejó margen para la realización de un ciclo que tuvo momentos antológicos.
Cruce generacional
Para Ayala, el balance es positivo, sobre todo porque pudieron generar un ámbito nuevo para la difusión de la música argentina y latinoamericana. “En la ciudad, existen varios espacios dedicados al folclore, pero no tantos con esta metodología de guitarreada”, explicó. Es que, para Pablo, uno de aspectos más interesantes que tuvo el ciclo fue la generación de una especie de “jam folclórico”, a través de formaciones musicales improvisadas en el momento.
Durante las distintas fechas de la peña, se sumaron varios músicos de otros puntos del país y sobre todo de localidades de la región, como San Carlos Centro, Esperanza y Gessler. También, del lado del público, se cruzaron varias generaciones, lo cual también posibilitó, según los organizadores, un intercambio muy valorable, que abre buenos augurios para las próximas ediciones. “Nuestra expectativa es tener un espacio propio, pero mientras tanto valoramos mucho esta posibilidad”, apuntó.