Enrique Cruz (h)
(Enviado Especial a Buenos Aires)
Discutido y no querido por la mayoría de los hinchas de Colón, el arquero sabalero cumplió con esa chapa que lo distingue: es un “saca-puntos”. Figura junto a Leguizamón.
Enrique Cruz (h)
(Enviado Especial a Buenos Aires)
El hincha de Colón no lo quiere. No todos, claro. Generalizar, en estos casos, no es bueno. Pero la realidad es que Jorge Broun no cuenta con el cariño de la gente, aún habiendo llegado al club en un momento muy complicado, con el equipo en la B y con un arquero (Germán Montoya) de notable actuación en el último torneo en Primera, que se había ido dejando una estela difícil de igualar. Sin embargo, Broun se sobrepuso a todo. Y demostró algo que no muchos arqueros pueden mostrar como carta de presentación: ser un arquero “saca-puntos”.
Broun lleva dos años y medio en Santa Fe. Fueron muchos partidos y como ocurre siempre, con todos los arqueros, en algunos goles tuvo responsabilidad. Pero, ¿cuántas veces fue figura?, ¿cuántos partidos fueron empate o victoria gracias a él?, muchos. El puesto de arquero es muy ingrato, porque siempre se pone bajo la lupa su reacción en los goles que le convierten al equipo por el sencillo hecho de ser el último obstáculo. Que salió, que no salió, que descuidó el palo, que llegó tarde... Se le encuentran motivos, a veces rebuscados, para echarle las culpas. Y ellos (los arqueros) saben, lo admiten y se la “bancan”, aún sabiendo que varias veces tienen razón y sienten interiormente la injusticia que les cae a la hora del análisis de su rendimiento.
¿La tapada del año? Mirá cómo salvó Fatura Broun a Colón con esta atajada ante Huracán ¡Tremenda! https://t.co/xuliI2b2BR — TyC Sports (@TyCSports) 3 de diciembre de 2016
Cuando se armó el equipo para esta temporada, Colón salió a buscar un arquero suplente de similar jerarquía. Más todavía, los dirigentes dejaron libres a Andrés Bailo y a Andrés Mehring, dos arqueros nacidos en el club. Lo de Bailo es entendible por la edad (28 años), pero lo de Mehring era una situación para analizar y esperar. Integrante de varias Selecciones juveniles, buen físico para el puesto, sólo atajó un partido y fue un 0 a 0 en cancha de Nueva Chicago (debut de Franco) en el que casi no le patearon. No tuvo casi chances de mostrarse y hoy es el arquero del equipo puntero de la B Nacional.
Pero dejando de lado esto, Colón contrató a Jorge Carranza, un arquero de experiencia y con jerarquía. Dicen que la idea de Montero era que directamente empiece atajando Carranza. Tuvo tiempo de evaluar a ambos en una pretemporada que se alargó más de lo previsto. Sin embargo, una lesión de Carranza hizo que empezara atajando Broun y se convirtió en artífice, en el arranque del torneo, de algunos puntos que le dieron tranquilidad de entrada a Montero y a todo Colón. Estuvo más de cinco partidos sin que le conviertan goles, hasta que una lesión lo marginó del partido con Atlético de Rafaela (cuando recién empezaba) y con Arsenal (el siguiente en Santa Fe). Sin embargo, el técnico le devolvió la titularidad a pesar de que habrá percibido la mejor opinión de la gente para que siga Carranza, antes de que vuelva Broun.
#PrimeraDivision El penal que Broun le atajó a Iritier en #Huracán 1 - #Colón 3. pic.twitter.com/VKP0xQm32Y — FútbolEntreLineasAR (@FutbolELineasAR) 3 de diciembre de 2016
Tiene personalidad y es un arquero “saca-puntos”. Ayer tuvo dos atajadas tremendas y clave. Con el partido 1 a 0, saca un cabezazo de Romero Gamarra desde adentro del área chica con unos reflejos increíbles. Y después de cometer el penal (mano a mano luego de una mala salida de Ledesma), se lo ataja de gran forma (mano “cambiada”) a Iritier, cuando el partido estaba 1 a 1 y si Huracán convertía el gol, seguramente a esta hora estaríamos hablando de una historia totalmente distinta.
Fue el primer penal que atajó Broun, en su carrera, jugando en Primera. El otro fue ante San Martín de Tucumán, pero en la B Nacional y cuando militaba en Rosario Central. “Hacía mucho que no atajaba un penal”, dijo Broun después del partido, pero en realidad fue el primero. Y tuvo claridad a la hora del análisis del partido: “Entramos dormidos en el segundo tiempo, muy dormidos. Se nos complicó por izquierda y por eso Paolo puso a Olivera, que es defensor, para que juegue en el lugar de Iván Torres, que estaba amonestado. Fue clave también el momento en que se paró el partido para tomar agua y ahí volvimos a ser el Colón del primer tiempo y ganamos el partido. No podemos darnos el lujo de entrar dormidos como lo hicimos en el segundo tiempo. Eso no puede volver a pasar”, señaló una de las grandes figuras de la tarde en el Ducó.
El discutido Jorge Broun se sobrepone a todo y cumple. Fue uno de los padres de la victoria y la atajada del penal resultó fundamental. En ese momento, Huracán se lo llevaba por delante a Colón y lo desbordaba por todos lados. Esa atajada lo hizo reaccionar al equipo y después pasó lo que ya se sabe: el envión final aseguró una victoria que en varios pasajes estuvo en duda y Broun se encargó de disiparla.
“Broun salvó el partido”
Paolo Montero admitió que Huracán “fue más que nosotros en el segundo tiempo” y que debió corregir sobre la marcha. “Angulo nos complicó más de la cuenta y por eso puse a Olivera, que es más defensivo que Torres”, señaló el entrenador sabalero, quien, como siempre, vivió con mucha intensidad el partido.
“Siempre digo lo mismo: esto es fútbol y suelen pasar cosas que condicionan luego el análisis. Yo estoy convencido de que cuando un equipo juega ordenado en defensa, es más fácil conseguir buenos resultados. Eso no quita que no salgamos a buscar los tres puntos. Siempre salimos a buscar la victoria, inclusive lo hicimos en el partido con Estudiantes. La prueba evidente se dio ante Newell’s, no sólo por la forma en que lo planteamos sino también por los cambios que hicimos”.
Por último, el entrenador rojinegro dijo que “Broun salvó el partido”, reafirmando la importancia de las atajadas del arquero sabalero, que fueron fundamentales para que el equipo tuviese la chance de alzarse con los tres puntos en el envión final.
Esta vez, Montero hizo muy bien las modificaciones. Primero, corrigió el problema que había por el sector izquierdo, con un Iván Torres amonestado y complicado ante la entrada de Angulo. Después, la entrada de Bernardi fue muy positiva (marcó el segundo gol). A lo último, salió Ortiz con una molestia y decidió el ingreso de Bastía para darle aire al mediocampo y retrasó a Fidencio Oviedo a la posición de marcador central.
Respeto y emoción
El Chapecoense estuvo presente. Los jugadores de Colón y Huracán salieron en simultáneo al campo de juego portando sendas banderas en alusión a la tragedia que enluta al fútbol mundial con el accidente fatal del plantel de Chapecoense. Ayer se llevó a cabo el funeral de las víctimas. Hubiese sido una buena decisión que, por las características de lo ocurrido, no se haya jugado ningún partido oficial de ninguna índole en el mundo entero. Pero como dice el dicho: “El espectáculo debe continuar”. De todos modos, el silencio se hizo “sentir” en el Ducó y hubo respeto por las víctimas.