El Litoral
Karen y su hijo Byron, que va al Jardín Municipal y Sandra, que recibió su nueva vivienda de manos del Presidente, algunas de las historias que mencionó Corral.
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A lo largo de su discurso, el intendente José Corral apeló a historias concretas en su relación con los vecinos de la ciudad, tal como ayer lo hizo el presidente Mauricio Macri. Muchas de ellas ya las contó a través de sus redes sociales pero hoy les dio un lugar preponderante al dirigirse a los concejales y a la ciudadanía en general durante la apertura de sesiones legislativas. Varios de los vecinos mencionados estuvieron hoy en el recinto.
Gastón: “Seguiremos con nuestro programa de apoyo a las primeras exportaciones y con la edición de la Semana del Comercio Exterior, que el año pasado contó con la participación de ocho compradores internacionales y más de 40 empresas locales. Uno de ellos es Gastón, a quien visité en su local de Av. Galicia: es el titular de Ferseb, una firma que se dedica a la aplicación de recubrimientos industriales, que emplea a más de 20 personas y gracias a nuestro acompañamiento ya comercializa en Bolivia”.
Karen y Byron: “Hace unos días, volví a encontrar a Karen, cuya historia resume la importancia de la educación, que sigue siendo el eje vertebrador de nuestras políticas. La conocí hace dos años cuando recorríamos Pro Mejoras Barranquitas para invitar a los jóvenes a volver a estudiar. Ella estaba embarazada y con un chiquito en brazos, Byron, de 6 meses. Le dije que podía llevar a su bebé al Jardín Municipal y en ese tiempo terminar sus estudios. Volví a verla el domingo pasado en la inauguración del desagüe Llerena: quería mostrarme el diploma del título secundario que alcanzó porque, además de su propio esfuerzo, el Jardín le permitió a Byron crecer cuidado y a ella estudiar”.
Abril: “Hablar de resiliencia urbana implica hablar de nuestras vidas. Porque somos quienes la construimos, los que padecemos cuando tropieza y quienes volvemos a juntar fuerzas para levantarla. Y gente como Abril nos inspiran a poner lo mejor para superarnos. Abril es no vidente. Nos conocimos cuando estábamos haciendo casa a casa en su barrio. Ella vive con su familia en Risso y Saavedra y se emocionó mucho cuando le contamos que el Desagüe Espora iba a pasar bajo su calle, porque es la obra que estaban esperando: ya no tendrá agua dentro de su casa ni se mojará la ropa los días de lluvias intensas, el transporte podrá pasarla a buscar para llevarla a la escuela y podrá comenzar con las clases de canto y de piano que tanto desea”.
Todo lo hasta aquí enunciado persigue un solo fin: trabajar para que Santa Fe sea una tierra de oportunidades. Así lo pude percibir en las últimas conversaciones que tuve el honor de compartir con muchos vecinos de la ciudad, cuando me contaban sus puntos de vista y cómo nuestros proyectos involucran sus vidas cotidianas.
Emanuel y Melisa: “Así conocí a Emanuel y Melisa de El Abasto; conforman una de las 3.841 familias que pueden edificar sus hogares tranquilas, porque cuentan con la escritura de sus terrenos”.
Ayelén y Juan: “También compartí un tiempo con Ayelén y Juan, quienes pasaron la Navidad del 2015 en un centro de evacuados. Hoy proyectan su futuro de manera distinta: ambos participan en las Escuelas de Trabajo y gracias a ello Juan realizó su primera práctica laboral. Ya no sufrirán más las inundaciones porque su nuevo hogar está a cota segura en Nueva Esperanza.
Sandra: “Al igual que el de su vecina Sandra, que recibió las llaves de su nueva casa de manos del Presidente de la Nación”.
Lionel y Alexis: son dos hermanos que, tomando mate en su casa de Loyola Sur, me contaron que gracias al Programa Arte y Comunidad se acercaron al Hip Hop y llegaron a ser parte de una obra con varias funciones en el escenario del Centro Cultural Provincial.
Brian, Dara y Dylan: “Conocí otros tres hermanitos que se acercaron a la música gracias al SOS Música: Brian que quiere ser arquitecto, Dara que tiene mucho talento y Dylan, de quien dicen los entendidos pinta ser el “Messi del violín”.
Mauricio de Coronel Dorrego, me contó que gracias al Municipio retomó la secundaria y hoy tiene su propio lavadero de autos. Lo mismo que Marcos, quien a pesar del desafío que le presenta su salud, fabrica juguetes y objetos de madera junto a su padre y está dando los primeros pasos con la ayuda del Centro de Emprendedores.
Noelia: Conocí también a Noelia y otras mamás de los chiquitos del Jardín Municipal de Las Flores. Todas ellas trabajan y el Jardín les ayuda en el cuidado de sus niños. Silvia, una de sus docentes que está cursando la Licenciatura, me contó que ella también disfruta del progreso de los niños, porque reciben la mejor educación en sus primeros años de vida.
Todos y cada uno de ellos encarnan esperanzas, son los dueños de los sueños por los que tenemos que seguir trabajando.