A Oseia le tocó venir al mundo en un lugar inesperado: la Casa de la Policía Comunitaria en el barrio Barranquitas. Su mamá de 15 años, junto a su pareja, llegaron de urgencia anoche a la comisaría, unos minutos antes de las 4 de la madrugada.
Se llama Oseia y está en buenas condiciones de salud. Dos agentes asistieron a la mamá en el parto.
A Oseia le tocó venir al mundo en un lugar inesperado: la Casa de la Policía Comunitaria en el barrio Barranquitas. Su mamá de 15 años, junto a su pareja, llegaron de urgencia anoche a la comisaría, unos minutos antes de las 4 de la madrugada.
Los agentes enseguida llamaron a la ambulancia, pero las contracciones se aceleraron y los policías se dieron cuenta que el parto era inminente. Los agentes Belén Insaurralde y Milton Peralta tuvieron que tirar una colcha en el piso de la cocina y recibir a Oseia como pudieron. Peralta fue el que recibió al bebé con sus manos.
El nacimiento los emocionó a todos y a las 4.20 llegó la ambulancia que trasladó a la mamá y su bebé a la Maternidad del Hospital Iturraspe, donde los médicos confirmaron que Oseia está en buenas condiciones. Pesó 2.775 kilogramos.