El Litoral
Antes de regresar dijo que la conflictividad social traba la llegada de inversiones al país.
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Telam - DyN
El presidente Mauricio Macri arribó esta mañana al aeropuerto internacional de Ezeiza procedente de Holanda donde ayer finalizó una visita de Estado y poco antes del mediodía encabezará el acto de inauguración del Centro de Transbordo Constitución en la ciudad de Buenos Aires.
El jefe de Estado, tras concluir su visita a los Países Bajos junto a la primera dama, Juliana Awada, con el propósito de relanzar la sociedad estratégica con el país europeo, arribó en un vuelo comercial minutos antes de las 6, y de inmediato se trasladó a bordo de un helicóptero a la residencia presidencial de Olivos.
Allí, a las 9.30, el primer mandatario encabezará una reunión de coordinación de Gobierno con los miembros de la mesa chica del gabinete nacional, y pasarán revista a los anuncios que formulará en los próximos días, entre ellos el plan para la construcción de 100.000 viviendas.
A las 12, el Presidente junto al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, dejará inaugurado el nuevo Centro de Trasbordo Constitución, una obra que busca beneficiar a más de un millón de vecinos y pasajeros que transitan a diario por esa zona de la Ciudad de Buenos Aires.
Antes de emprender el regreso, el presidente aseguró que la conflictividad social "influye" para la llegada de inversiones al país.
"Todo influye, porque acá lo que está en discusión es si este cambio cultural es producto de una decisión de los argentinos o solamente de la decisión de un presidente", sostuvo al ser consultado sobre "lo conflictiva que está la calle" con "los paros y protestas".
En declaraciones a los medios argentinos al concluir la visita de Estado a Holanda, Macri remarcó: "Les digo a todos que por supuesto no soy el dueño del cambio, sino el resultado del cambio que decide la gente".
"La mayoría entendió que es un largo camino que nos lleva a una mejora permanente que terminará algún día con los excluidos en la Argentina y habrá oportunidades de desarrollo", completó.
Además, insistió en que "nunca" prometió "un milagro de un día para el otro, ya fue casi un milagro haber evitado la crisis terminal a la que íbamos en pocas semanas o meses si no producíamos este cambio copernicano". "Pero en 2017 vamos a crecer, 2018 será mejor todavía y 2019 va a ser mejor todavía", estimó.