El Litoral
El proyecto fue ideado por el municipio y los fondos son provinciales. El plazo de ejecución previsto es de seis meses.
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Prensa MCSF
En el marco de las acciones incluidas en el Acuerdo Capital, el intendente José Corral y el gobernador Miguel Lifschitz presentarán este martes el plan de recuperación y puesta en valor de la Plaza 25 de Mayo.
El proyecto ejecutivo de la obra, que fue elaborado por la Secretaría de Planeamiento Urbano del Gobierno de la Ciudad, contempla además la intervención integral del casco histórico. La iniciativa cuenta con un presupuesto oficial de $ 56.237.789,98 -que serán financiados por el Gobierno provincial- y un plazo de ejecución de seis meses.
Al respecto, el Intendente valoró que “la Plaza 25 de Mayo es epicentro del casco histórico de Santa Fe, lugar fundacional de nuestra ciudad y el escenario urbano de representación ciudadana más significativo”.
En esta línea, anticipó que “la obra, que se planificó desde el Municipio, se propone como contemporánea y fue diseñada con el objetivo de mejorar la calidad ambiental, dar prioridad al peatón y de devolverle la jerarquía de Plaza Principal, patrimonio de los santafesinos”.
La actividad se concretará este martes a las 12 en el Salón Blanco de Casa de Gobierno, espacio ubicado en calle 3 de Febrero 2649.
Detalles de la obra
Sobre estos trabajos, en una reciente entrevista de El Litoral al ministro de Obras Públicas de la provincia, Julio Schneider, se explicó: “Queremos jerarquizar la plaza 25 de Mayo porque es, quizás, el lugar más emblemático de la ciudad. Está rodeada por edificios importantes como la Casa de Gobierno, Tribunales, la Catedral Metropolitana y el Colegio Inmaculada Concepción, entre otros”, graficó el funcionario.
Para ello, la novedad será el fuerte protagonismo que esta remodelación, que incluye el entorno de la plaza y de la Casa Gris, dará a los peatones. “Hoy por hoy, la mayoría de las ciudades percibe que el peatón está por encima del automovilista”. En este caso, para lograrlo se ampliarán las áreas peatonales, se reducirán las áreas de circulación y se eliminarán los estacionamientos perimetrales. La reforma contempla además la unificación de los niveles de las veredas con la calzada y la señalización de los senderos circulatorios para vehículos a través de bolardos (bochas de hierro galvanizado).
La parada de taxis será relocalizada sobre General López que, además, tendrá un solo sentido de circulación de oeste a este desde San Jerónimo.
“Se van a unificar los solados de toda la superficie; las áreas de circulación que enmarcan la plaza van a ser de pavimento intertrabado y el resto de mosaicos graníticos de 64 panes”, anticipó Schneider. A todo esto, se va a sumar una obra hidráulica importante para garantizar un buen escurrimiento pluvial hacia San Martín.
La obra contempla la incorporación de más de 1.500 metros cuadrados verdes “porque las calles internas de la plaza se van a recuperar para uso público”. A la vez, se respetarán los ejemplares arbóreos existentes y se hará una reforestación con nuevas especies.
Por otra parte, se van a poner en valor las dos fuentes, se recuperarán las farolas originales que están sobre General López y se va a mejorar la iluminación ornamental en toda la plaza.
“La idea de jerarquizar el área viene dada desde hace tiempo y por suerte estamos coincidiendo con el municipio”, sostuvo el titular de Obras Públicas y aportó que “la intención es que, en simultáneo con los cien años que cumplirá el edificio de Casa de Gobierno en 2017, la plaza esté a nuevo”.