Lía Masjoan
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Twitter: @lmasjoan
En septiembre vence la prórroga que otorgó el Concejo a Netoc.
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Inserta en un entorno degradado, el futuro de la terminal de ómnibus es eje de análisis. En septiembre de este año vence la prórroga que el año pasado otorgó el Ejecutivo Municipal (con autorización del Concejo) a Netoc, la actual concesionaria de la administración y explotación de la estación Manuel Belgrano.
Mientras tanto, una comisión mixta -integrada por concejales y representantes del gobierno local- estudia sus fortalezas y debilidades, antes de que el Municipio elabore un nuevo pliego y llame a licitación para la nueva concesión.
Los plazos por delante son exiguos, de cara a todo lo que queda por resolver. En abril venció el plazo para que la comisión elabore el Master Plan y sus conclusiones serán presentadas en las próximas semanas, según informaron sus integrantes.
El punto más delicado es, quizás, el tiempo de concesión que podrá otorgarse al nuevo administrador. El terreno donde está asentada la terminal es de la Provincia y fue cedido en comodato al municipio en el año 1998, por el entonces gobernador Jorge Obeid, por 10 años, con opción a 20 más. Es decir, debería vencer en 2018. Pero en 2015, la Municipalidad y la provincia dieron de baja ese acuerdo y firmaron uno nuevo por 10 años, sin opción a más. Así las cosas, la Municipalidad puede disponer del edificio hasta 2025, con lo cual podría otorgar la concesión sólo por 8 años. Con el temor de que este plazo no resulte de interés para los posibles inversores, la actual administración municipal ha iniciado gestiones para ampliarlo. Esto es clave para elaborar el nuevo pliego y salir a la búsqueda de interesados en hacerse cargo de la terminal. Lo que sí tiene en claro esta gestión es que quiere concesionarla, y no tomarla bajo el ala de la administración municipal.
"Expectantes”
Por su parte, la firma cordobesa Netoc, que tiene a cargo la concesión desde 2001, no ha manifestado hasta ahora demasiado interés en seguir en Santa Fe. “Estamos expectantes porque no está el pliego definido”, dijo Eudaldo Coch, apoderado de la firma, dejando una puerta abierta en medio de la incertidumbre actual. A esto sumó algunos cambios en las políticas nacionales de transporte, como la refuncionalización del sistema ferroviario y la intención de reactivar la actividad aerocomercial, “que muestra un horizonte de mediano plazo no tan convincente para invertir en el sistema de transporte de las terminales de ómnibus”.
El pliego que elaborará el Municipio debería estar listo en el mes de julio para dar tiempo suficiente a la empresa actual a replegarse, si es esa su última decisión, y para garantizar el interés de nuevos inversores. A quien se le otorgue la nueva concesión se le exigirá, obviamente, una serie de obras que estarán detalladas en el pliego.
Master plan
La comisión que tiene a su cargo la elaboración del Master Plan de la terminal fue creada por ordenanza N° 12.281, en septiembre de 2016.
Está integrada por cuatro concejales -Marcela Aeberhard, Juan José Saleme, Adriana Molina y Carlos Suárez- y representantes de las secretarías de Planeamiento Urbano, Producción y Comunicación y Desarrollo Estratégico de la Municipalidad. El objetivo es “estructurar y agrupar obras e intervenciones de orden público, privado o de gestión mixta, tendientes a completar el equipamiento de la ciudad, permitiendo desde una perspectiva integradora optimizar el uso de las vacancias urbanas existentes y mejorar las condiciones ambientales del espacio público”.
Los primeros pasos fueron escuchar las inquietudes de los actores principales que tienen relación con la terminal. Se hicieron reuniones con el concesionario actual, con los organismos de control del transporte, los referentes del sector transportistas (empresas de transporte y encomiendas), ámbito académico, Safetur y sector comercial.
Conclusiones y propuestas
Una de las primeras conclusiones a las que arribó la comisión es que la terminal “está muy bien ubicada y no hace falta trasladarla”, coincidieron en una entrevista con El Litoral Andrea Valsagna, secretaria de Comunicación; Marcelo Pascualón, secretario de Planeamiento; y los ediles Aeberhard y Suárez. “Tiene buena conectividad, con una salida rápida por avenida Alem y 27 de Febrero, y está cerca del área céntrica de la ciudad y del shopping, y de un sector con muchas clínicas y sanatorios”, destacaron como puntos positivos.
Esto no es menor, ya que a partir de allí se comenzó a pensar en cómo refuncionalizar el espacio actual para optimizar el área de servicios y de comercios, la seguridad y la atención del usuario, descartando su traslado.
Uno de los puntos débiles detectados es la falta de tecnología en el funcionamiento general del edificio y en la prestación de servicios. Otro, es la falta de conectividad de la terminal con el barrio Candioti Sur, lindante hacia el este. Hoy, por cuestiones de seguridad vial, está separado por un largo enrejado, y no se aprovechan los amplios espacios verdes que la rodean. Por eso, cómo integrarla al entorno urbano y, a la vez, revitalizarlo, es parte del desafío que se planteó la comisión.
Algunas ideas sobre las que se trabaja puertas adentro de la estación de pasajeros proponen trasladar oficinas administrativas para dar más espacio al sector comercial; mejorar su iluminación y reestructurar la distribución de las boleterías.
Puertas afuera, también se piensa en trasladar la estación de recarga de combustible de los colectivos, ubicada en Las Heras y Junín; y en continuar con la semipeatonalización de calle Hipólito Irigoyen y lograr una mayor vinculación con la plaza España. Y en dos intervenciones más ambiciosas: llegar con inversiones inmobiliarias público-privadas (como en el Parque Federal) a dos terrenos del Estado nacional que están sobre avenida Alem, hoy en desuso; y reflotar un viejo proyecto para ensanchar calle Belgrano (muchas construcciones ya tienen retirada su línea de edificación) para sumar más área peatonal, en una zona de tránsito intenso.
La falta de tiempo, ante una licitación inminente, torna muy ambicioso el objetivo inicial y la concreción de un Master Plan que no sólo readecue los espacios internos del edificio, sino que también lo integre mejor a todo su entorno urbano. Es por eso que ya se evalúa proyectar la inversión en etapas.
El movimiento, en cifras
Por mes, llega a la terminal un promedio de 20.241 coches, según datos suministrados por la empresa concesionaria Netoc a la Municipalidad, en febrero de 2016. De ese total, el 43 % (8.716 coches) hacen un recorrido de hasta 50 kilómetros; el 22,4 % (4.540 coches) recorren distancias mayores a 300 km; y el 19 % (3.991) tienen como destino sólo la ciudad de Santa Fe, con lo cual no abonan ingreso a la terminal. El resto, un 12,8 % recorre distancias entre 50 y 300 km.
En lo que respecta al sector comercial y boleterías, los datos proporcionados por el municipio son los siguientes: hay 16 comercios, aunque ocupan 20 locales porque algunos han requerido más espacio; hay 27 locales de venta de pasajes, que ocupan 36 boleterías, y hay 3 empresas de encomiendas, en 6 locales.
Hay sólo dos locales comerciales vacíos y tres boleterías.
6.761 metros cuadrados es la superficie total del edificio: 4.993 m2 en Planta Baja, 968 m2 en el primer piso y 800 m2 en el segundo piso.
20.241 coches ingresan por mes a la terminal en promedio Unos 8.700 son servicios que recorren menos de 50 kilómetros.