Redacción El Litoral
Es un propuesta de los concejales Simoniello y González, que tiene el objetivo de mejorar la gestión y el aprovechamiento de los inmuebles en “estado de abandono”.
Redacción El Litoral
Casonas históricas abandonadas —que se “pudren” a la vista de todos—, edificios a medio terminar y cientos de galpones que juntan polvo y ratas en los barrios de la ciudad, son el eje de un proyecto que se vuelve a presentar en el Concejo para generar un marco jurídico —un protocolo de intervención— que permita al municipio gestionar lo que se define como “vacancias urbanas”.
Es una iniciativa de los concejales radicales Leonardo Simoniello y Leandro González, que se presentó este miércoles por la mañana. “La idea es generar una herramienta, un programa de intervención que no solo identifique las casas patrimoniales o edificios en estado de abandono, para estimular su uso y aprovechamiento, sino también los galpones que no se utilizan desde hace años en los barrios y que provocan muchos reclamos de los vecinos”, explicó Simoniello, en una entrevista con El Litoral.
La idea de “caries urbanas”, que el concejal tomó de programas similares que se desarrollaron en España, también tiene el objetivo —cuando no se pueda articular con el privado una estrategia para recuperarlo— de aprovechar espacios degradados de la ciudad para generar espacios verdes, centros culturales o educativos y áreas en las que se puedan edificar nuevas viviendas, en sectores consolidados de la ciudad que suelen contar con todos los servicios.
En el proyecto, que volverá a recorrer las distintas instancias legislativas en el Concejo, se establece una primera instancia: la de detectar y definir un inmueble como “vacancia urbana”.
Una vez que el municipio da este paso —si el proyecto es aprobado—, el dueño de esa propiedad tiene un plazo de 6 meses para coordinar un proyecto para aprovecharlo o ponerlo en valor. “El espíritu de la norma es estimularlo al privado para que pueda planificar una estrategia de recuperación”, señaló Simoniello.
Ese plazo puede ser prorrogado, si los funcionarios municipales consideran que el proyecto que se está analizando para la propiedad es viable. Pero si esa instancia fracasa, el municipio va a contar con un marco legal para avanzar hacia alternativas que permitan aprovechar un espacio que está en desuso.
Simoniello recordó, además, que en la legislatura avanza un proyecto de la diputada provincia Patricia Tepp, que tiene la meta de “ampliar la declaración genérica de utilidad pública para la expropiación de inmuebles”. El foco de este proyecto también es generar una norma que permita a los gobiernos locales recuperar las “caries urbanas”.
Objetivos
El proyecto de ordenanza, que presentó está mañana el concejal Leonardo Simoniello, propone la creación del Sistema de Gestión Integral de Inmuebles Urbanos Vacantes u Ociosos de la ciudad de Santa Fe. El objetivo es impulsar la utilización productiva de todo inmueble emplazado en el ejido municipal para evitar su abandono u ocupación irregular, detectar oportunidades para intervenciones urbanísticas estratégicas y promover el involucramiento de la sociedad en los procesos de planificación y desarrollo urbano, a través de la formación y utilización de herramientas de articulación público-privadas.