El ciudadano paraguayo que escapó de la Jefatura de Reconquista y fue recapturado, no dio pistas acerca de quiénes fueron sus cómplices dentro de la estructura policial. Se presentaron dos prófugos. El relato esperado no llegó. Luego de contar una historia que fuentes judiciales califican como "fantasiosa", el narcotraficante paraguayo Oscar "King Kong" Cardozo terminó diciéndole al juez: "Yo tengo códigos y no voy a entregar a nadie". Cualquier desprevenido podría considerar que se trata de un caso novelesco, si no fuera porque dejó al descubierto los alcances del narcotráfico y la corrupción que echa raíces en algunos sectores de la Policía de la Provincia. Cardozo escapó el miércoles de la semana pasada de la Jefatura de Reconquista, luego de que dejaran abiertas las puertas y desactivaran el sistema de videocámaras instalado en el edificio. El juez de Instrucción Enrique Muller le tomó declaración en calidad de testigo de lo ocurrido, pero el narcotraficante relató una historia poco creíble según la cual logró escapar saltando desde un techo de ocho metros de altura y luego estuvo perdido en el monte. Cuando le preguntaron cómo era posible que estuviera limpio y afeitado luego de tantos días deambulando por el monte, respondió que no delataría a sus cómplices. ¿Por qué declaró como testigo, y no como imputado? La respuesta a este interrogante es simple: según el Código Penal, para que a una persona se le impute haberse fugado de la prisión, debe protagonizar algún tipo de violencia física o material. Pero en este caso, simplemente le abrieron la puerta para que, tal como de lo definió el juez federal Virgilio Palud, se fuera "como Juancho por su casa". Frente a esta situación particular y luego de escuchar su declaración de ayer, Muller decidió indagar esta mañana al narcotraficante por el delito de falso testimonio. ¿Contará esta vez quiénes lo ayudaron a fugarse? Si no lo hizo ayer, resulta al menos poco probable que esta vez lo haga. Detenidos y liberados Pero al margen de la situación de Cardozo, la Justicia continúa investigando quiénes fueron los cómplices del narcotraficante. En las últimas horas, los dos únicos policías que continuaban detenidos recuperaron su libertad, pues en caso de haber infringido la ley se trata de delitos con penas menores y que son excarcelables. Ayer por la tarde, se presentaron en el Juzgado dos prófugos que habrían "aguantado" a Cardozo luego de que éste abandonara la cárcel: se trata de Oreste Bernardi y su hijo, Alan Bernardi, quienes ya fueron indagados y cuentan con antecedentes penales. Ellos habrían sido los encargados de recoger al narcotraficante en un automóvil apenas abandonó la Jefatura de Reconquista. Ambos continúan detenidos, junto a otros tres posibles cómplices: Diego Gutiérrez -habría compartido celda con Cardozo hace algunos meses-, un remisero de apellido Espinosa y Antonio Márquez. A todos se les imputa haber facilitado la fuga. Otra de las preguntas que aún no encuentra respuesta es por qué Cardozo no huyó rápidamente de la zona. Fuentes tribunalicias informaron que en el momento de ser detenido, "King Kong" llevaba consigo suficiente dinero como para comprar un pasaje y alejarse del norte santafesino. Cardoso cayó el miércoles de esta semana, poco antes de las tres de la tarde y apenas a unos diez kilómetros del lugar del que se había fugado. La fuga del narcotraficante provocó un tembladeral político y derivó el movimiento en la cúpula de la Policía de la Provincia. En la Legislatura, la oposición solicitó interpelar al ministro de Gobierno, Roberto Rosúa. Sin embargo, no se obtuvo el número suficiente de votos como para lograrlo (ver página 13). Cuentas bancarias Hasta este mediodía, el juez de Instrucción de Reconquista, Enrique Muller, no había recibido los informes solicitados a bancos de la zona, para determinar si existieron movimientos sospechosos en las cuentas de algunos integrantes de la anterior cúpula policial de la región. De la Redacción de El Litoral