El Litoral
El cliente contó su “periplo” para lograr que funcione la conexión. Visitó en dos oportunidades la oficina hasta que consiguió la solución. Mirá el increíble relato.
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El enojo de un santafesino por el mal servicio de Internet generó una situación poco habitual en la oficina comercial de la prestadora del servicio. Ante la falta de respuestas por parte de la empresa, decidió llevar el modem, arrastrándolo como si fuese una mascota.
El cliente explicó que todo comenzó cuando se hizo cargo de una deuda anterior, de una inquilina y al mismo tiempo decidió a pagar un servicio superior para utilizar en su negocio de venta online. Es decir, tener conexión es indispensable para su trabajo.
El periplo de este santafesino comenzó el 20 de agosto. Continuó el 24 de ese mes con alrededor de 40 llamados telefónicos para intentar conseguir una solución. En el departamento de “gestión” le explicaron que estaba “todo bien” que no había deudas sino que era un “problema técnico”.
Ante tal inconveniente, decidió concurrir el jueves 7 de septiembre a la oficina comercial de la empresa prestadora. Luego de una considerable demora, el cliente fue atendido por una empleada de la empresa.
“Conseguime un técnico y me lo llevo de la mano a mi negocio o llamá a la policía. Mi paciencia se agotó, estoy deprimido. De acá me voy con un técnico o con la policía”, le reclamó a la empleada y lo dejó grabado en un audio que compartió con El Litoral. En esa oportunidad le dijeron que un técnico concurriría al negocio para verificar el inconveniente.
Sin embargo, la solución no llegó. Y decidió nuevamente concurrir a la oficina comercial. En esta oportunidad, lo hizo arrastrando el modem. Ante la sorpresa de los presentes, el cliente expresó: “Lo traje a pasear, para que no se aburra”.
Todo terminó cuando los técnicos de la empresa se presentaron en el local del cliente y solucionaron el inconveniente.