El Litoral
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El Tate, alentado por miles de hinchas que viajan desde Santa Fe, buscará quedar entre los 8 mejores del certamen.
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El año pasado, en ese recordado cruce contra River Plate en el José María Minella de Mar del Plata, el Unión de Leo Madelón se quedó en los cuartos de final de la Copa Argentina. Es por eso que ahora buscará, con un triunfo ante el Deportivo Morón en cancha de Instituto de Córdoba, volver a instalarse entre los ocho mejores de la competencia y quedarse con el cheque de 1.350.000 pesos en Alta Córdoba. En caso de avanzar, se las verá con el ganador de Olimpo de Bahía Blanca-Gimnasia de Mendoza.
Hay una sinergia muy particular que une a Unión con Leonardo Carol Madelón y la Copa Argentina. Porque el año pasado se llevó todos los aplausos, a pesar de perder con River Plate al lado del mar.
Y porque ahora, el primer ladrillo importante de su nuevo tercer ciclo como técnico de Unión, el ex “10” lo construyó en la cancha de Arsenal, eliminando a un muy buen equipo como es Lanús en la etapa anterior de la Copa Argentina.
Desde ese momento en la Copa contra Lanús, que marcó la vuelta de Leonardo Carol en el banco tatengue, todas fueron rosas por López y Planes: logró reiventar un equipo que estaba vencido, está invicto, sacó 11 puntos sobre 15 y hoy es escolta de la Superliga junto con River Plate, por debajo de la línea del puntero Boca Juniors.
Para muchos, incluso, recuperando la memoria de jugadores como Nereo, Brítez, los dos Pittón, Acevedo, Soldano o Gamba, Unión es la auténtica sorpresa o revelación de esta Superliga en el fútbol argentino.
No se trata de subestimar o de no valorar el aporte del experimentado Bottinelli, la grata sorpresa del moreno Yeimar Gómez Andrade, las corridas de Zabala o los pasajes de Aquino (está lesionado, ni siquiera viaja, al igual que Nereo), pero está más que claro que la clave de Madelón como entrenador pasó por recuperar el nivel, las ganas y hasta la autoestima de la legión que ya venía en este plantel.
Es cierto que el mismo Leo venía avisando que “Unión tiene un plantel cortito, demasiado cortito”, algo que quedó en evidencia para este partido de la Copa Argentina más que nunca: 1) pierde a su arquero titular, Nereo Fernández; 2) no tiene a su volante más creativo, Claudio Aquino; y 3) lo lleva “entre algodones” al representativo Ema Brítez.
El uruguayo Matías Castro irá bajo los caños en reemplazo del histórico Nereo; otra vez probará por la banda con Franco Fragapane, un punta que fue “trabajado” para hacer todo el recorrido; finalmente, será Damián Martínez la opción de recambio si es que no está al ciento por ciento Ema Brítez.
Si bien Madelón lo mejoró al equipo en todas sus líneas, el dato que más llama la atención es donde se para el binomio de ataque con Franco Soldano y Lucas Gamba; es decir, en los metros finales de la cancha. En ese sector, Unión se transformó en un equipo noqueador con su dupla letal en el área grande rival. Esta sociedad de goleadores vivos se entiende a la perfección: entre los dos aportaron seis de los siete goles que tiene el equipo en este arranque invicto y escolta de la Superliga, con cuatro gritos de Soldano y dos de Gamba (en realidad, el cuyano hay que agregarle uno más por Copa Argentina contra Lanús).
Para Unión —sus dirigentes, sus jugadores, la gloriosa gente— y para Madelón, la Copa Argentina es una idea fija. La tienen visualizada a la perfección. Saben que la llave se “limpió” al quedar eliminados equipos como San Lorenzo y Racing, por lo que no sería impensado (si bien a los partidos hay que jugarlos) que la Madeloneta 2017 se instale en las semifinales de este creciente torneo criollo.
Quizás, además, se quedaron “con la sangre en el ojo” en la edición pasada al ser eliminados por el gran River de Gallardo. Ahora, el objetivo de miércoles se llama Deportivo Morón. Si hace bien los deberes en Alta Córdoba, Unión se meterá entre los ocho mejores de la Copa Argentina “en menos de lo que canta un gallo”.
Nereo y Aquino ni viajan
Luciano Balbi, Nelson Acevedo, Franco Fragapane, Diego Zabala, Bruno Pittón, Walter Bracamonte, Damián Martínez, Brian Blasi, Lucas Gamba, Juan Rivas, Julián Vitale, Emanuel Brítez, Manuel de Iriondo, Guillermo Méndez, Franco Soldano, Yeimar Pastor Gómez Andrade, Matías Castro, Mauro Pittón, Alan Sosa y Jonathan Bottinelli son los jugadores que viajaron hoy y quedaron concentrados en Córdoba junto a Leo Madelón.
3.000 entradas es lo que llevaba vendido Unión al cierre de este edición, es decir en el mediodía del martes en Santa Fe, recordando que tanto hoy a la tarde y mañana miércoles hasta las 13 se seguirá el expendio: 300 pesos las generales y 500 pesos las plateas. Este primer corte de 3.000 tickets no incluye lo que se pueda vender en el Patio Olmos de Córdoba. “No se venderá nada en la cancha de Instituto”, avisan.