Ya se donaron más de 2 mil libros a Juglares Sin Fronteras

Tomás Rico
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Luego del incendio ocurrido hace diez días, que destruyó la estructura donde funcionaba la biblioteca popular Juglares Sin Frontera, ubicada en Colastiné Norte (Los Talas 6021), la ayuda empezó de inmediato y trae aires de esperanza al espacio cultural para volver a ponerse de pie.

Marcela Sabio, narradora oral escénica, quien está a cargo del lugar, mantuvo reuniones con representantes de Cultura y Desarrollo Social del municipio para determinar cuál será el monto económico con el que los van a asistir.

A su vez, recibió a Claudia Volonté, directora provincial de Programación Interinstitucional, quien le comentó que están en tratativas para brindar una ayuda por única vez para acelerar los tiempos de la construcción. “No recibiremos un subsidio porque llevaría casi un año hasta que la Nación lo habilite”, aseguró Sabio, en diálogo con El Litoral.

El diputado nacional Hugo Marcucci aportó una suma de dinero para la reconstrucción edilicia. “Esperamos contar también con la ayuda del cuerpo de diputados, ya que presentamos una nota, asesorados por Jorge Henn y Santiago Mascheroni”, contó Sabio.

Hipótesis

Tras haber recorrido el lugar, los bomberos descartaron que el fuego se haya iniciado por un cortocircuito —la primera hipótesis que manejaban. En referencia a esto, Sabio comentó que días antes del siniestro habían cambiado el cableado y la térmica eléctrica, e indicó que no dejaron de tener luz en ningún momento, por lo que la idea de que haya sido un desperfecto eléctrico quedó al margen.

La sospecha ahora recae sobre si fue un acto vandálico o si el incendio se inició en un campo lindante por la quema de pastizales. “Es un terreno que está totalmente abandonado y notamos que está quemado el pasto. Por eso pensamos que quizás se haya iniciado ahí el fuego que quemó la biblioteca. Si se produjo de forma intencional sería muy triste”, sostuvo con angustia.

Al ser uno de los únicos lugares culturales con el que cuenta Colastiné Norte, muchos vecinos están muy enojados porque sienten que perdieron un lugar que sentían propio. “La gente de la zona no tiene la posibilidad de ir hasta el teatro, cine o bibliotecas de Santa Fe, éste es el único lugar que tenían de esparcimiento cultural”.

Colecta exitosa

A los pocos días de haberse producido el hecho, la reacción de la gente fue asombrosa y en gran número comenzaron a acercar sus libros al Mercado Norte y al Museo López Claro. “Reunimos más de 2.000 libros, algunos muebles y una computadora”, agradeció Sabio.

Además, el artista “Coco” Sahda se comprometió a donar 3.000 volúmenes de su biblioteca y llegará un camión del Instituto Nacional de Teatro con una cuantiosa cantidad y se sumará a la entrega la Sociedad Argentores.

Hasta tener un espacio para guardar los libros, la asociación La Casa del Nogal se ofreció a prestar una pieza de sus instalaciones para resguardarlos. “Libros vamos a tener de sobra porque hay muchas manos solidarias, pero es urgente que podamos construir”, aseveró la narradora.

Ayuda sin fronteras

Luego de tantos años de recorrer vastas ciudades de Latinoamérica y España, por su labor como narradora oral escénica y haber dado numerosas charlas, Sabio pudo dejar su huella, y al anoticiarse del lamentable suceso, sus amigos de todo el mundo comenzaron a organizar eventos para recaudar fondos y destinarlos a la biblioteca santafesina.

“En Cusco (Perú), la gente que formé como narradores están haciendo festivales, también en varios lugares de España y en México. Nos gratifica saber cómo se moviliza la gente por una biblioteca que se quemó, en un lugar tan pequeño del mundo”, concluyó emocionada.

Para ayudar

Desde la biblioteca abrieron un espacio de colecta digital para donar dinero, que será destinado a comprar materiales de construcción. Para más información ingresá a este link: www.idea.me/proyectos/57592/comunidad-suena-su-biblioteca