De la Redacción de El Litoral
La pretemporada se realizará, como le gusta a Madelón, en Mar del Plata: harán base en el Hotel Iruña. La idea es jugar tres amistosos en “La Feliz”.
De la Redacción de El Litoral
El 1 a 1 marcó el punto final de Unión en este 2017 que se fue para los tatengues desde lo deportivo, ya que el equipo de Leo Madelón no jugará la última fecha, recordando que adelantó ese partido con River Plate en el Monumental. Con vacaciones anticipadas -entre miércoles y jueves quedarán liberados los futbolistas-, el que tendrá un permiso especial para irse en las próximas horas es Franco Soldano: el delantero tiene que ir a un pueblito de Italia para firmar los papeles que faltan y así tener la ciudadanía, por lo que será “jugador comunitario”.
Este aspecto será vital para el ex Unión de Sunchales, hoy goleador en el Unión de Madelón, porque en las grandes ligas los refuerzos extranjeros tienen “cupos”. Así, con el pasaporte comunitario en la mano, se facilitará su desembarco en ligas como la española o italiana, donde hace tiempo un par de clubes lo vienen siguiendo.
Quien maneja los destinos de Franco es el Dr. Hernán Rubeola, amigo personal de la familia Soldano y especialista en derecho internacional deportivo. En distintas ocasiones, expresó claramente que se está trabajando para encontrar lo mejor para todas las partes: el jugador y Unión.
La entidad de López y Planes adquirió a Franco Soldano, en su momento, en apenas 50.000 dólares. Ahora, con el futbolista teniendo contrato vigente hasta junio de 2019, quedaron en claro dos cosas:
— 1) No hay cláusula de salida ni blindaje
— 2) Unión posee el 75 por ciento de los derechos y el 25 por ciento restante es de la familia Soldano
En algún momento trascendió alguna frase de la que, luego, nadie se hizo cargo: “Unión quiere cuatro millones de dólares limpios, como mínimo, por el pase de Soldano”. De todos modos, si esa fuera la base, no es una cifra impensada para un jugador que es joven, tiene una buena proyección de gol y ahora el plus del pasaporte comunitario para el mercado europeo.
El plantel: vacacione
En un primer momento, a pesar que Unión ya jugó la última fecha ante River y no tendrá competencia este fin de semana, Leo Madelón pensó en que igualmente los jugadores entrenen hasta el sábado 9. Incluso, quería hacer un amistoso con alguno de los otros equipos que adelantaron la última fecha.
Finalmente, desistió de esa idea. Y ahora el plantel entrenaría “hasta miércoles o jueves”, para luego ser licenciado. La fecha de retorno será el 2 de enero: la primera semana será en Santa Fe, para posteriormente irse a Mar del Plata, donde estarán más de diez días.
El objetivo del cuerpo técnico, que hará base en el hotel Iruña de Mar del Plata, es concretar tres partidos amistosos: los rivales podrían ser Olimpo de Bahía Blanca, Aldosivi y San Martín de San Juan.
Ya de vuelta en la capital de la provincia, el objetivo final será sumar algún partido preparatorio más antes de la vuelta oficial de la Superliga, programada para el último fin de semana del mes de enero.
Los refuerzos
Está claro que Unión cruza los dedos para que, deportivamente, no se vaya nadie. Es más, todos admiten que Madelón tiene un plantel demasiado “corto” y que por eso se destaca mucho más la campaña que hizo y los puntos que sacó hasta este momento.
Será clave el tema Soldano: no es lo mismo imaginar un 2018 con el delantero que sin él. De todos modos, los cañones de Madelón, los dirigentes y el mánager Martín Zuccarelli apuntarían a refuerzos de mitad de cancha para adelante.