Redacción de El Litoral
Transportistas de cereales autoconvocados no dejan entrar cargas al complejo agroindustrial exportador más importante del país.
Redacción de El Litoral
Los transportistas de granos autoconvocados quieren reunirse con el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, como condición para levantar las medidas de fuerza que llevan adelante desde hace 5 días. Pero en el gobierno nacional rechazan las modalidades “violentas e irracionales” que impidieron trabajar a quienes intentaban llevar su carga a destino.
El gremio de Hugo Moyano negó haber tenido parte en los actos vandálicos que se produjeron en varios casos, con camiones detenidos y descargados a la vera de la ruta. Para los conductores de camiones que protestan, los vándalos son “infiltrados”.
Lo que exigen los autoconvocados es que se les paguen tarifas de referencia. El problema es entre los dadores de cargas -acopiadores y dueños de campos que mandan su cosecha a puerto- y transportistas, que en el caso de los granos son camioneros dueños de una o pocas unidades más, sin llegar a tener grandes empresas de logística.
Las protestas se registran en las rutas de Córdoba, Santa Fe, Buenos Aires, Chaco y Santiago del Estero. Los camioneros piden un órgano de control en Afip, y que en los puertos y plantas de acopio se les brinden “servicios adecuados” y los “pagos de estadía por demoras superiores a las 24 horas” en las terminales de descarga‘.
Con más o menos amabilidad, los transportistas que intentan llegar hasta Rosario con granos en sus equipos, son “invitados” a desistir de su propósito. Pueden quedarse en la protesta o volver a destino.
“Cerealeras y cooperativas quitan el 15% y a veces más de lo que paga el productor por el traslado de los granos y eso es una arbitrariedad porque nosotros nos hacemos cargo de los costos”, aseguró Juan Balul, del centro de camioneros de la zona núcleo.
Desde Confederaciones Rurales Argentinas expusieron que “no es tolerable ni la violencia, ni el abuso para reclamar derechos, que pueden ser justos pero el desorden en el que se plantean la convierten en irracionales”.
El gobierno fijará tarifas; los fletes cerealeros se establecen libremente “por oferta y demanda” señalaron desde el Ministerio de Transporte. Cuestionaron la paralización del comercio exterior y advirtieron que la Cámara Argentina de Nutrición Animal no puede garantizar el abstecimiento, por lo que “hay animales muriéndose”.
Piquetes “selectivos”
La Agencia de Seguridad Vial de Santa Fe detalló que se registran manifestaciones de camioneros transportistas de cereales en algunos puntos de las rutas y accesos del territorio provincial. Se permite el paso de tránsito liviano y micros de pasajeros, pero se impide la circulación de camiones.
Ante este panorama se recomienda circular con cautela, prever demoras y respetar rigurosamente las indicaciones del personal de Policía de Seguridad Vial.
Los manifestantes se concentran en el kilómetro 141 de la autopista, a la altura de Sauce Viejo, así como en el nacimiento rosarino de la doble calzada que comunica esa ciudad con la capital provincial.
Los manifestantes están además en RN 33 entre los km. 712,500 y 719 a la altura de Chabás, y en el Km. 757, a la altura de Pujato; RN 33 y RN 7 a la altura de Rufino, y en la rotonda de Venado Tuerto; RN 11 a la altura de Reconquista, en el acceso Sur; RN A012 y RP 14 a la altura de Piñero y RP 14 y RN 8 a la altura de Chapuy.
Rechazo
La Bolsa de Comercio de Santa Fe expresa su “rechazo a los hechos de violencia originados en el transporte agrícola autoconvocado, que está impidiendo la libre circulación en las rutas y condiciona, fuertemente, la comercialización de granos. La entidad insta a los protagonistas y a las autoridades competentes, a encontrar una solución al tema del reclamo, en el marco de la legislación y disposiciones vigentes. Asimismo, aboga por un mayor control en la red vial para evitar la repetición de los hechos lamentables ocurridos”.
Pérdidas
La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) precisó que la cantidad de camiones arribados a los puertos desde Arroyo Seco hasta Timbúes cayó hasta 70%, por la dificultad de circular por rutas. “Además de provocar la pérdida de mercadería a los cargadores, productores, acopiadores y cooperativas, están determinando que los exportadores no puedan cumplir en tiempo y forma con los embarques”, afirmó. La Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) elevó la parálisis al 90%: “Se encuentran virtualmente paralizadas todas las principales plantas agroindustriales y puertos exportadores, desde el Gran Rosario hasta Bahía Blanca y Necochea-Quequén”
>>> 25 mil dólares diarios es el costo de un barco demorado por no poder cargar sus bodegas y zarpar a tiempo.