China quiere mejorar su relación con el Vaticano

El Litoral

dpa

"Estamos implicados activamente en discusiones profundas sobe determinados problemas", afirmó el portavoz de la Administración Estatal para Asuntos Religiosos, Xiao Hong. China espera que el Vaticano muestre buena voluntad, dijo por su parte el subdirector de la Administración, Chen Zongrong.

Sin embargo, ni Xiao ni Chen quisieron pronunciarse sobre las posibilidades de que se llegue a un acuerdo para poner fin a décadas de conflicto entre el Vaticano y la Iglesia estatal china.

El papa Francisco está buscando un acercamiento a Pekín. En el centro de la polémica está la interrogante sobre quién puede designar a los obispos. La Iglesia estatal china no reconoce como autoridad al papa, mientras que la Iglesia clandestina se mantiene leal al pontífice.

Más de la mitad de los más de diez millones de católicos en China no se someten al control del Estado y son leales al papa, razón por la cual muchos creyentes son perseguidos.

Según medios chinos, el papa planea como primer paso en el proceso de acercamiento reconocer a siete obispos de la Iglesia estatal a cambio de que Pekín le otorgue cierta participación en la futuro elección de obispos.

Las concesiones que el Vaticano planea hacer a China han suscitado fuertes críticas, también en el seno de Iglesia católica, donde se ha advertido sobre el peligro de una "venta" de la Iglesia clandestina.

Después de tomar el poder en 1949, los comunistas chinos rompieron las relaciones con el Vaticano y en 1951 fundaron la "Asociación Patriótica Católica", una Iglesia sometida al control del Estado.

Muchos sacerdotes y monjas que se negaban a adherirse a la Iglesia estatal fueron arrestados, maltratados y en algunos casos asesinados. Los católicos que mantuvieron su lealtad con el papa se vieron obligados a practicar su fe en la clandestinidad.