El Litoral / dpa
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La ex presidenta surcoreana Park Geun-Hye, que cumple una pena de 24 años de prisión por corrupción, fue condenada hoy a ocho años de cárcel por apropiarse ilegalmente de fondos de los servicios secretos y violar la ley electoral.
El Tribunal del Distrito Central de Seúl le impuso una pena de seis años de cárcel y una multa de 3.300 millones de won (2,5 millones de euros) por haberse apropiado de cuantiosos fondos de los servicios secretos y haberlos utilizado en parte en su propio beneficio.
También fue condenada a otros dos años por violar la legislación electoral. La Fiscalía General la había acusado de haberse inmiscuido ilegalmente antes de las elecciones parlamentarias de 2016 en la carrera por la nominación en su formación, el Partido Liberal de Corea (Saenuri).
La ex presidenta rechazó las acusaciones, que considera ‘políticamente motivadas‘ y hoy no se presentó ante el tribunal.
Park, de 66 años, fue destituida en marzo de 2017 en el marco de un escándalo de corrupción. En abril de este año fue condena por corrupción, abuso de poder, soborno y por revelar secretos de Estado.
Hija del dictador militar Park Chung-hee, fue acusada de permitir que su amiga Choi Soon-sil se inmiscuyera en los asuntos del Gobierno a pesar de no tener ningún cargo oficial. Choi fue condenada a 20 años de prisión.
Según el tribunal que la condenó a 24 años, Park ayudó a su amiga a extorsionar a numerosas empresas, incluido el grupo Samsung, elevadas cantidades de dinero que fueron a parar a organizaciones dirigidas por Choi. También la consideró cómplice de la elaboración de una lista negra de intelectuales críticos con el Gobierno bajo su mandato.