Publicaciones en redes sociales permitieron descubrir la maniobra de los desarmaderos

Danilo Chiapello | [email protected]

Este viernes por la mañana los fiscales Ezequiel Hernández y Leandro Lazzarini, junto al comisario de la Policía Federal Argentina (delegación Rosario), José Kupczewski, brindaron detalles sobre los allanamientos a desarmaderos ilegales de nuestra ciudad.

En nuestra edición anterior, consignamos que uno de los operativos se desarrolló en Aristóbulo del Valle y Gorriti, otro en Aristóbulo del Valle y Callejón Roca y un tercero en un predio de varias hectáreas donde se desarmaban los vehículos.

En conferencia de prensa, el jefe policial comentó que todo comenzó cuando personal de inteligencia de esa fuerza detectó publicaciones que se hacían en distintas redes sociales, ofreciendo compra y venta de autopartes.

“Ante ello establecimos la existencia del lugar y constatamos la actividad que estaba realizando. También detectamos otro domicilio que es el domicilio fiscal que registra este comercio y un predio donde se estarían realizando los desarmes para la posterior venta de las partes.

La investigación se inició hace varias semanas y por el predio y el desarrollo de la actividad comercial intuimos que hace mucho tiempo que esta gente está trabajando”, prosiguió.

“Aproximadamente, se secuestró cerca de un millón de autopartes que están compuestas por carrocerías, automotores y diversas piezas que conforman el motor de un vehículo en general.

Verificaciones

Más adelante, el fiscal Hernández sostuvo que “no hay hasta el momento constatación de piezas robadas. Hemos hecho algunas verificaciones al azar y ninguna nos dio que provenga de vehículos robados. No obstante, estamos hablando de más de 200 motores, otros tantos rodados, miles de puertas, entre otros artículos que hay que verificar. Ya hemos pedido la colaboración del perito verificador, y ahí vamos a poder tener mayores precisiones.

En el momento del operativo, lo que se hizo fue aprehender a las 13 personas que se encontraban trabajando en esos lugares. Son hombres y mujeres, todos mayores de edad. Se las identificó y ninguna presentaba antecedentes ni pedido de captura. Entonces lo que se hizo fue la identificación dactiloscópica, que fijen un domicilio para ser citados en los próximos días”.

Violación de una ley

Más adelante, el fiscal explicó que “aquí estamos ante una clara violación de la ley 25.761 que en su artículo 13 establece una cláusula penal con respecto a aquellas personas que hagan como de su actividad habitual el desarmado de motores, la venta y el transporte de autopartes, violando las disposiciones de esa ley.

Estamos ante una situación no sólo de comercialización de autopartes, sino también de reutilización prohibida. Los autos una vez siniestrados se dan de baja y son algunas de las autopartes las que pueden ser comercializadas.

Dinero “marcado”

“Nosotros iniciamos la investigación a partir del anoticiamiento que nos trae la Policía Federal que había hecho una tarea de inteligencia en Internet. Había publicaciones de venta de autopartes prohibidas.

Una vez que tenemos conocimiento del hecho, disponemos una serie de medidas investigativas para demostrar la comisión de estos ilícitos. Entre esas medidas quizás la principal sea un procedimiento de compra controlada que se realizó el día de los allanamientos. Se le dice vulgarmente “marcar dinero”.

Una vez individualizados los billetes, se les entregó a un personal policial que estaba vestido de civil, quien registró una compra de una autoparte prohibida de gran tamaño, estamos hablando de un diferencial. Todo se grabó en audio y video.

Con esa compra pudimos terminar de individualizar ambos domicilios, tanto el de la venta al público como donde se almacenan estas autopartes que era también donde se producía el desguace.

Una vez finalizada la compra controlada a los pocos minutos se realizaron los allanamientos donde se secuestró lo ya mencionado, además de cajas con documental, celulares, computadoras, etc.

Monto “altísimo”

Respecto al significado económico de estas maniobras, el funcionario del MPA opinó que “es muy difícil hacer una estimación en dinero. Porque un valor es el que puede tener para estas personas que comercializaban ilegalmente. Otro monto es el que se puede obtener a partir de reducir todo esto a chatarra. Además, no hemos finalizado el inventario de todo lo que ha sido secuestrado. De todos modos, si atendemos todo lo incautado el monto es altísimo.

Por último, indicó que “las penas que prevé esta ley van de 15 días a tres meses. Pero además fueron secuestradas dos armas de fuego, un revólver calibre 32 y una escopeta 12.70.

Lo que sigue ahora es verificar todas las piezas secuestradas. En caso de hallar alguna que provenga de algún hecho ilícito, podría cambiar la figura penal aplicable.