El Litoral / [email protected]
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A la Superliga no le gustó la imagen que dio el estadio de Huracán, escenario del partido entre el Globo y River. Desparejo, desnivelado, con matas de pasto ausentes, el campo de juego se pareció demasiado al que se vio durante la práctica del seleccionado antes de partir a Rusia, y poco al de un estadio de un torneo de elite como pretende ser el de la primera división.
Por eso, durante la mañana del lunes se reunieron los integrantes del departamento de legales de la Superliga con Facundo Cino, gerente de licencias. Según consigna La Nación, el club de Parque Patricios será expedientado y se arriesga a “una fuerte multa económica”, de acuerdo a lo que contaron fuentes de la liga de primera.
El departamento de Licencias será el encargado de estipular el castigo. Según el reglamento del área, el estado del césped no se encuentra dentro del listado de “criterios A”, que los clubes están obligados a cumplir.
Sin embargo, los abogados trabajaron sobre una estrategia: en los temas que tienen que ver con el estado del campo de juego, el reglamento de competencias de la Superliga se complementa con el Reglamento General de la AFA. Allí, el artículo 74 inciso 1.2 es claro.
El apartado se refiere a las “características topográficas del campo de juego” y solicita los siguientes requisitos: “Superficie uniformemente plana y nivelada; césped: debe cubrir la totalidad de la superficie; drenaje: se debe dotar al campo de un sistema apropiado de drenaje”. El césped del Ducó, que estaba en pleno proceso de resembrado, no cubría la totalidad de la superficie del campo. Y tampoco estaba plano ni, mucho menos, nivelado.
Al ser consultados sobre el tema, River se remitió a las declaraciones del entrenador, Marcelo Gallardo, luego del partido de anoche. “Sabíamos que el partido iba a ser horrible por el estado del campo”, dijo el Muñeco. Y añadió: “¡Fútbol argentino! A veces se dan este tipo de partidos y hay que olvidarlos rápidamente”.
Huracán, sin embargo, optó por no responder a las preguntas sobre el estado de su campo de juego para el partido del domingo por la noche con River.