Los procesos de transformación cultural demandan varios años de acciones consistentes, sostenidas e inteligentemente planificadas, a la medida del ADN de cada organización. Desde hace 30 años Great Place to Work trabaja sobre este tema, en 60 países alrededor del mundo, acompañando a organizaciones que desean trabajar sobre su cultura. Este grupo de organizaciones abarca desde conocidas multinacionales, hasta pequeñas y medianas empresas familiares, todas compartiendo una preocupación común: prepararse proactivamente para construir el futuro que desean. Si bien cada organización debe encontrar su propio camino, en línea con la naturaleza de su negocio y con su propia identidad, hay ciertos elementos claves que son comunes a todas las organizaciones que logran resultados extraordinarios en estas acciones. Pero todo este proceso de transformación solo es posible cuando se cuenta con un diagnóstico y un plan elaborado a partir del mismo, y para ello se requiere trabajar sobre una batería de indicadores que muestre claramente la situación actual y que permita un monitoreo regular de la evolución de ese proceso de transformación a lo largo del tiempo. La buena noticia es que no solo es posible para cualquier organización, sea cual fuere su naturaleza, su negocio y su tamaño, sino también que existen numerosos casos de éxito que prueban que es posible dar los pasos necesarios para construir el futuro que se desea.