El Litoral
El plantel de Unión tendrá el fin de semana libre y retornará el lunes a los entrenamientos. Madelón piensa en el mismo equipo para jugar con Argentinos. Es una firme posibilidad luego de la gran actuación ante Central.
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Descanso reparador en una semana muy tranquila y relajada, no sólo porque este fin de semana no hay actividad sino porque se viene de jugar un partido de altísimo vuelo futbolístico, como el del domingo pasado en Rosario.
El encuentro ante Cosmos sirvió para que algunos jugadores tengan ritmo de competencia. En realidad, Unión ha mantenido una base que sólo se alteró en pocas ocasiones y en forma muy puntual.
Hay casos como los de “Droopy” Gómez, el propio Zurbriggen (más allá de que fue titular ante Rosario Central), Corvalán (por más que haya iniciado el torneo entre los 11 de arranque), Blasi, De Iriondo y Andrada, entre otros, que no han tenido rodaje suficiente en este torneo.
No hay lesionados, tampoco se lamentan suspensiones y las variantes surgen desde el pensamiento táctico del técnico (como pasó en los últimos dos partidos de visitantes, con las titularidades para De Iriondo, ante Racing y Zurbriggen, contra Rosario Central) y no porque haya que sufrir lesiones, sanciones y ni siquiera bajos rendimientos.
El partido que Unión jugó el domingo ante Rosario Central se salió por completo del molde, pues fue una labor casi completa. Si bien es muy difícil que exista perfección en el fútbol, hacía realmente mucho tiempo que no se veía a un equipo con un nivel de juego y con una respuesta individual y colectiva tan importante.
Se viene Argentinos Juniors, en un partido que supone riesgos anexos como por ejemplo las dimensiones más reducidas del campo de juego. Los Bichos Colorados están atravesando un proceso de cambios luego del alejamiento intempestivo de Berti. Es un rival duro, con el que Unión seguramente tendrá que estar atento porque la cancha exige concentración plena durante los 90 minutos.
La excelente actuación en Rosario permite pensar en un Unión sin cambios para jugar el partido que ha sido programado para el domingo de la semana que viene a las 15.30, tras lo cual el Tate disfrutará de la posibilidad de jugar dos encuentros consecutivos de local: Godoy Cruz y Patronato.
En cuanto al rival, Damián Batallini era uno de los que tenía chances de volver al equipo pero se resintió de la lesión y es dudosa su puesta a disposición de Carboni. “Esto recién empieza, no hay que alarmarse tanto, pasa que no estamos siendo contundentes y no estamos demostrando todo lo bueno que veníamos haciendo”, señaló el mediocampista. Tampoco está bien, desde lo físico, uno de los MacAllister —Alexis— que es otra de las dudas del técnico, aunque todavía restan casi diez días de trabajo hasta el partido.