Domingo Sahda
Domingo Sahda
En el Espacio de Exposiciones Made (Por amor al arte), Sarmiento 3060 de la ciudad de Santa Fe, la artista plástica María Fernanda Delfor exhibe una colección de acuarelas de su autoría, agrupamiento éste que nuclea bajo la denominación: “Tirarse al agua”, en obvia alusión al material pictórico-plástico empleado para la configuración de cada trabajo a la vista, acuarelas. El conjunto de obras a la vista, presuntivamente de reciente data, con obras de tamaño medio y menor, se inscriben en el espacio plástico-expresivo de la Abstracción Libre, de raíz expresiva Expresionista. En todas las piezas a la vista se configuran proposiciones visuales que remiten a hipótesis expresivas “fragmentadas”.
El espacio pictórico se presume ámbito acotado sobre el cual se diseña la metáfora plástica, señalándose subjetiva o directamente encuadres centrales y periféricos que no se definen como puntos centrales o accesorios de la construcción plástica a la vista. Idéntico nivel en todos los sectores de cada “cuadro”, obviándose la hipótesis constitutiva esencial de “Figura-Contexto”, pues todos los subespacios tienen idéntica jerarquía plástica. Así las cosas, cada obra se señala como una parcela de un todo preexistente, de incidencia directa y potencial expresivo homogéneo. La calidad de factura técnico-plástica es de notoria calidad fáctica. No obstante ello, las obras a la vista se perciben como “fragmentos” de una propuesta abarcativa de mayor y más clara relevancia discursiva.
La organización de cada “lámina” se define como intento -de excelencia, por cierto- cuyo impacto visual se señala.
El llamado “lenguaje visual” presupone, como todo discurso vinculante en sus formas y sus contenidos expresivos para establecerse así vínculos subjetivos mayores que el circunstancial impacto que se subsume en sí mismo, sólo como experiencia circunstancial. El excelente manejo matérico, tal cual ya se ha explicitado, es el recurso esencial. Más cuando éste se subsume en experimentaciones subjetivas, la presuntiva comunicación e interrelación no produce conmoción alguna que vaya más allá de subrayar la calidad del oficio, que en este caso, se reitera, es de excelencia. El paso siguiente será dotar de contenido diferenciador a cada propuesta.