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La secretaría de Hacienda municipal, María B. Etchevarría, fue al Concejo a explicar el proyecto de Presupuesto Municipal 2019. Elogios desde el oficialismo, críticas de los dos sectores opositores.
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Fue a puertas cerradas y en la sala Zapata Gollán del Concejo Municipal. La secretaria de Hacienda del Municipio, María B. Etchevarría, se sentó frente a los concejales de la ciudad para explicar los detalles técnicos del proyecto de Presupuesto Municipal 2019, la “ordenanza madre” que, junto con las ordenanzas Fiscal y Tributaria anuales, constituyen el andamiaje sobre el cual se organiza las finanzas del Municipio. El Concejo se prepara para tratar estas tres normas clave: sería en la sesión del miércoles 19.
El líneas generales, el cálculo de gastos y recursos para el año entrante que remitió el Ejecutivo al Concejo prevé “una retracción económica del 0,5%, una variación estimada del nivel de precios implícitos del orden del 35% y una inflación estimada a diciembre de 23%. El tipo de cambio previsto promedio para 2019 es de ,10 por dólar”, dice el texto. Los recursos que quiere asignar la administración Corral para el ejercicio próximo se estiman en .710.481.949. El cálculo de gastos total es por el mismo monto.
El oficialista Carlos Pereira (UCR-Cambiemos) declaró estar “conforme” con el presupuesto para el año que viene. “Pese a las dificultades, lograremos mantener una buena inversión en obra pública para 2019. Y además, los municipios han tenido una paritaria muy buena: los empleados municipales van a terminar con una paritaria por encima del 40 % y no perderán ingresos en relación con la inflación. Esto implica ciertos sacrificios, pero con estos dos puntales: no afectar la obra pública ni el sueldo de los empleados”.
Desde el Frente Progresista, el opositor Leandro González descreyó de que el proyecto de presupuesto “genere grandes expectativas de obras, y que éstas realmente provoquen transformaciones importantes en la ciudad, sobre todo en el oeste y noroeste”. Consideró que “es un presupuesto austero, pero austero para los sectores que más necesitan”. Según su análisis, hay una “detracción en fondos del 53% en áreas como Salud y, en Trabajo, un 39 % menos, comparándolo con el presupuesto actual”.
Marcela Aeberhard, del Bloque PJ - Santa Fe, marcó algunos puntos sobre los cuales desde su sector hay dudas: “Primero, la rescisión del convenio con la EPE por alumbrado público. Económicamente no hay ahorro hoy (hay un pedido de empréstito de 150 millones para recambio de luminarias). La ciudad está pagando $ 9,5 millones mensuales por alumbrado. Nos está saliendo muy caro”.
Otro punto “preocupante” es para la edila el monto de fondos asignados a atender la cuestión social: “Hay una plan alimentario presupuestado por sólo 390 mil pesos. Es un monto realmente irrisorio. Y para las Escuelas de Trabajo (que ahora pasarían a integrar un programa) hay presupuestados millones para 2019, contra millones de este año: $ 11 millones menos. Este presupuesto tiene poco compromiso social”, fustigó. “Pedimos garantías para las obras públicas mal hechas: hay calles que quedaron más altas que las veredas en Santa Rosa de Lima, Las Flores I y Los Hornos”.