Tropezó con una baldosa y tendrán que indemnizarla

Una mujer cobrará 22000 pesos por un juicio que le ganó al municipio rosarino, luego de que la Justicia lo encontrara responsable por el estado de la vereda en que tropezó la víctima.

La Justicia santafesina condenó a la Municipalidad de Rosario a pagar 22.000 pesos más intereses, a una mujer que en mayo de 2002 sufrió un accidente, al tropezar con baldosas flojas de la vereda.

El accidente ocurrió el 25 de mayo del 2002, a la 13.30, cuando Virginia Funes caminaba por Olegario Andrade al 800. La fuerte caída y sus consecuencias para la víctima motivaron la sentencia del Tribunal Colegiado de Responsabilidad Extracontractual N° 2 de los Tribunales de Rosario, integrado por los jueces Víctor Hugo Moneta, Alejandro Martín y Pedro Boasso.

La demanda fue presentada por la dupla de abogados Omar Abel Benabentos y Valeria Romina Piazza que representan a Virginia Funes. Pedían una indemnización por daños y perjuicios contra la Municipalidad de Rosario, "o contra quien resulte responsable jurídicamente''.

Los defensores postularon que Funes sufrió "una fuerte caída a raíz del mal estado de la acera'', hecho que trató de contrarrestar la Dra. María Eugenia Lara, que patrocinó a la Municipalidad de Rosario. Ambas partes acercaron pruebas que fueron evaluadas por el Tribunal.

"Despegadas y flojas''

Una escribana constató que las baldosas "se encontraban despegadas y flojas'', hecho que pudo comprobar la Justicia con muestras fotográficas, advirtiendo "que hay unión de dos estilos de baldosas diferentes, provocando un gran desnivel en la vereda''.

La mujer que acompañaba a Funes el día del accidente declaró que casi se cae junto. Pero "la vereda no estaba rota, sino floja, como salida del lugar, yo la ayudé a levantarse y nos volvimos a la casa'', apuntó.

Para la Justicia, en materia de daños, "corresponde resguardar la integridad física de los habitantes de la ciudad, que transitan por sus calles''. Además, el tribunal apoyó su decisión diciendo que "caminar por una vereda, aunque sea lugar conocido por quien lo usa, no implica aceptar un altísimo riesgo; por ello, no es legítimo presumir que la víctima haya querido sufrir el daño''.

En su defensa, la Municipalidad de Rosario intentó despojarse de responsabilidad acusando a los frentistas "por la falta de conservación en buen estado de la acera'', pero la Justicia desechó esa posibilidad.

Por una mano rota

El Tribunal fijó por el daño patrimonial la suma de .000, y otros .000 en concepto de daño moral y psíquico, lo que hace un total de .000. Además, la Municipalidad deberá pagar los honorarios de los profesionales que intervinieron en el caso, que rondan una suma cercana a los $ 17.300.

Las cifras a pagar encuentran fundamente en el examen físico, que da cuenta de la "secuela de traumatismo de mano izquierda con fractura de metacarpianos que la incapacita en forma parcial y permanente''.

También se encuentra acreditado que la mujer se desempeñaba como portera de un edificio y con ese trabajo mantiene a sus hijos. "Sin duda la incapacidad detectada tiene directa relación con las labores'', aseguraron los jueces.

La pericia psicológica hace constar que "el accidente se ha ido constituyendo como un hecho que conmocionó la vida psíquica de la Sra. Virginia. El síntoma dominante lo constituyó la angustia''.

Caminar por Santa Fe puede ser peligroso

Las veredas de la capital provincial son una perfecta muestra de lo peligroso que puede ser para los transeúntes locales salir a dar un paseo. Pero a partir de ahora, no sólo serán los ciudadanos de a pie quienes sufran la irregularidad del terreno, sino que ante el perjuicio público el Estado municipal también puede ser considerado responsable si alguien llegara a lastimarse.