El ministro de Salud de la provincia, Mario Drisun, calificó hoy de “inaceptable” el caso ocurrido días atrás en el hospital Iturraspe, cuando una joven mamá de 17 años embarazada de 37 semanas concurrió de urgencia para ser asistida y fue derivada a su casa hasta la mañana siguiente, cuando le iban a practicar una cesárea y el bebé murió antes del parto. Además, el ministro agregó que continúa la investigación interna del caso para determinar responsabilidades.
Drisun expresó hoy por LT10 que “es inaceptable que nos ocurran estas circunstancias en la maternidad del Iturraspe. Aquí hay un sumario. Esta situación no va a quedar impune. Con la tecnología y el recurso humano que tenemos, no puede ocurrir una situación así”.
El caso
Todo se inició la noche del martes 11 de marzo pasado, cuando una joven de 17 años, acudió a la guardia médica del Iturraspe con 37 semanas de embarazo. Llegó derivada del centro de salud del barrio Las Delicias con “una reacción a las sales biliares: una picazón de manos y pies, provocada por la elevación las enzimas hepáticas por encima de los valores normales”. Así explicó a este diario el subdirector del hospital, Dr. José Del Prado. También detalló que “fue examinada y diagnosticada por la médica del momento. También monitoreó al bebé ante el riesgo de su potencial muerte súbita propio de esta enfermedad. La médica determinó que no había sufrimiento fetal y decidió llevar el embarazo a término por cirugía en la mañana siguiente, siguiendo con las pautas de internación del hospital, porque ya era de noche”. Así, enviaron a la joven a su casa para que volviera al otro día. El miércoles por la mañana, mientras preparaban a la mamá para la cirugía, “el corazón del bebé dejó de latir” contó Del Prado.
La familia de la joven acusó al hospital de mala praxis. De allí que hoy “estamos en una fase aguda de investigación para determinar cómo fueron los hechos”, agregó el subdirector del Iturraspe en un articulo publicado por este diario el pasado 14 de marzo. El mismo había anticipado entonces que la semana siguiente llegarían al hospital un grupo de cuatro obstetras de la ciudad de Rosario, quienes tenían previsto iniciar una especie de auditoría de las acciones técnico-científicas realizadas.
El ministro de Salud de la provincia, Dr. Mario Drisun, ordenó en persona que se realice una investigación en el hospital Iturraspe para esclarecer las circunstancias en que falleció un bebé, ese miércoles por la mañana. Y el informe hasta hoy no fue dado a conocer.
Esa misma noche del 12 de marzo pasado, se realizó una reunión que se extendió desde las 22 y hasta la madrugada, y que convocó también al coordinador de nodo de Salud Santa Fe, Leandro Martínez, al Consejo de Administración del hospital, al jefe del Servicio de Obstetricia, Dr. Bernardo Ulla, y a la responsable de la guardia médica, Dra. Marisa Espinosa.
Mientras continúa la investigación interna, el ministro Drisun anticipó hoy: “Vamos a proponer cambios para que se refleje un espíritu solidario con la sociedad”. (Audio: LT10)