Ariel Durán y Sergio Ferrer
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En Santo Tomé se seguía con mucha atención el desarrollo de la crecida del Salado y se esperaba que para la jornada de hoy el río alcance los 4,70 metros (esta mañana, a las 7, había llegado a 4,69 metros, 5 centímetros más que ayer), que es la altura considerada como el nivel de alerta para esta jurisdicción.
Así lo manifestó Ricardo Méndez, secretario municipal de Obras y Servicios Públicas, quien aclaró, además, que la información relacionada con Recreo, donde en las últimas horas se observó un significativo descenso de las aguas, daba a entender que la situación más crítica ya se ha superado.
“Como hacemos cada vez que ocurren emergencias como éstas, desde el municipio se trabaja en forma conjunta con las áreas de Acción Social y Defensa Civil (Seguridad Ciudadana), para saber cómo se encuentran los vecinos que viven en las zonas más vulnerables, aquellos que tienen sus casas por afuera del anillo de defensa, y mantenernos atentos”, explicó el funcionario.
“Les avisamos el jueves y el viernes, cuando empezamos a recorrer esas zonas, que son Costa Azul, Costa Dorada (también conocida como Costa de Oro) y el sitio que está al este de la Planta de Tratamiento de Líquidos Cloacales, donde viven varias familias”, contó Méndez. “De todos ellos, sólo un vecino de Costa de Oro creyó necesario trasladarse y lo hizo por su cuenta”, redondeó.