El Litoral
DyN
El mejoramiento del clima en Córdoba estaba aliviando la situación de los inundados y permitía, en algunos sectores, el inicio de tareas de reconstrucción, mientras la situación del pueblo de Idiazábal, en el sudeste, continuaba siendo la más crítica y la casi totalidad de la población permanecía evacuada.
El intendente de Idiazábal, Eliberto Favalli, informó esta mañana que solo quedaban en el pueblo "alrededor de 300 habitantes" de los 1.500 que tiene.
El jefe comunal dijo a radio Cadena 3 que el nivel del agua "desde anoche se ha mantenido", pero destacó que "se está amurallando el pueblo, haciendo montañas de contención para tratar de evitar que el agua siga entrando masivamente".
Idiazábal, ubicado a unos 260 kilómetros al sudeste de la ciudad de Córdoba, se encontraba inundado prácticamente en su totalidad por lo que incluso el edificio de la Intendencia estaba bajo el agua, aunque Favalli advirtió que aún no era posible evaluar los daños en viviendas e infraestructura.
En la zona noroeste de la provincia, una de las ciudades más comprometidas era Jesús María, donde hoy permanecían 62 personas evacuadas, según informó la Junta Municipal de Defensa Civil, y aseguró que la energía eléctrica estaba recuperada en la mayor parte de la localidad.
En tanto, los pobladores de las localidades situadas a la vera del río Ctalamochita, como Villa María, Bell Ville, Villa Nueva, Ballesteros, entre otras, vivían hoy un alivio porque las barreras de contención construidas por vecinos en las últimas horas superaron "exitosamente" la enorme presión del agua.
De esta forma, aún no había anegamientos en Villa María y Villa Nueva, donde ya habría pasado el pico máximo de la creciente, pero en la zona sur de Ballesteros unas 40 personas debieron abandonar sus casas y se aguardaba para hoy el nivel extremo de la creciente, lo mismo que en Bell Ville.
Por otra parte, Balnearia, al noreste de la provincia, que días pasados quedó prácticamente en su totalidad bajo el agua a raíz de lluvias torrenciales que superaron los 750 milímetros en una semana, presentaba hoy una importante bajante.
El ministro de Gestión Pública de la Provincia, Manuel Calvo, aseguró que "la situación tiende a normalizarse en la mayor parte del este provincial".
En esa localidad donde hubo casi 500 evacuados, hoy permanecían 120 fuera de sus casas, aseguró el ministro.