El ministro del Interior, Wado de Pedro, recordó que, así como hubo 2019 – una expresión que en algún momento de 2018 dijo el gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá- también hay 2023 y enfatizó que para el gobierno nacional el federalismo es que "cada argentino tenga un empleo digno" en el lugar del país en que viva.
De Pedro y la directora nacional de Migraciones, Florencia Carignano, estuvieron el viernes en la ciudad de Santa Fe donde participaron del Primer Plenario de presidentes Comunales e Intendentes Justicialistas de la Región Centro, a sala llena, en el hotel Ate – UNL. El funcionario enfatizó los ejes de su gestión, pero también formuló una fuerte apelación política.
De Pedro recordó las competencias que recibió apenas asumió en el ministerio del Interior en 2019 – Migraciones, confección de DNI y Pasaportes, entre otros – y junto con quienes lo acompañaban se dieron a la tarea de discutir qué era el federalismo y definieron que, para ellos, era que cada argentino tuviera un empleo digno y de calidad en cada uno de los pueblos y ciudades donde viviera.
"Con los gobernadores y gobernadoras, en medio de la pandemia, y a partir de la matriz productiva de cada comuna, municipio y provincia, definimos un plan de obras públicas estratégicas para permitir que cada argentino pueda vivir donde nació, crecer, trabajar y disfrutar de la hermosa identidad que tienen nuestros pueblos y ciudades", expresó con énfasis, De Pedro, al tiempo que reivindicó el suyo, la ciudad bonaerense de Mercedes.
"Después, continuó, hicimos los foros con los empresarios con los que discutimos y analizamos lo que era necesario para invertir y generar más empleos. De allí surgió algo muy interesante que fue un consenso de 1500 obras estratégicas para potenciar el perfil productivo de la provincia. Solo nos queda terminar Santa Fe y provincia de Buenos Aires", manifestó el ministro del Interior.
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De esos foros, enumeró, surgieron una serie de obras como los gasoductos para traer el gas de Vaca Muerta a la Región Centro, la necesidad de conectar los parques industriales con el gas y las redes de alta tensión, y la construcción de obras interprovinciales como la de los Bajos Sub Meridionales en Chaco, Santiago del Estero y Santa Fe, proyecto del que se habla desde hace al menos 40 años y que el ministro informó que ya se empezaron a hacer algunas obras de las que hacen falta para convertir en productivas más de un millón y medio de hectáreas.
De Pedro contó que el jueves en Catamarca habían estado analizando una obra que interesa a las provincias del norte del país y a las de la Región Centro como es la construcción de un corredor bioceánico para que la producción argentina pueda ser exportada hacia Asia desde los puertos de aguas profundas de Chile.
"El más avanzado es el denominado Atacalar. Es un proyecto viejo, que tiene más de 100 años. La primera ley es de 1918 y después Perón en su primera presidencia hizo otra para la construcción de un corredor ferroviario, pero en 1955 se terminó el proyecto. Es algo que deben tener presentes todos porque cada empresa, cada producto, cada hora de trabajo argentina puede llegar a ser mucho más competitiva si podemos lograr de una vez por todas poner en condiciones los corredores bioceánicos, que son multimodales", dijo el ministro.
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En su reivindicación del federalismo, De Pedro apeló a la historia y recordó que en el siglo XX fue el peronismo y el ejército los que planificaron y tomaron decisiones estratégicas para el desarrollo del país. "En 1927 Alver creó la Fábrica de Aviones (FADEA) en Córdoba y en 1947 el peronismo creo la universidad. A partir de ese polo de ingeniería y metalmecánico se instalaron las grandes automotrices como Fiat. Después Perón se propuso hacer el tractor Pampa y después el avión Pulqui. Esa es la Argentina productiva y multipolar, no podemos seguir concentrando todo alrededor del Puerto de la ciudad de Buenos Aires. El federalismo no es concentración económica ni es concentración poblacional alrededor de un solo puerto", enfatizó.
En este sentido, reforzó con datos su posición, aseguró que el 40% de la población argentina vive alrededor del puerto de Buenos Aires y el 56 % del empleo formal esta en un corredor formal que va desde La Plata a Rosario, y propuso transformar ese país unipolar persuadiendo a los argentinos de que no podemos seguir con gobiernos centralistas, que le dan más a las personas, ciudades y empresas que más tienen.
En tono de campaña
"Hay que redistribuir la riqueza en Argentina, hay que redistribuir los recursos que llegan a los municipios, hay que redistribuir la riqueza a lo ancho y a lo largo de la Argentina", dijo y llamó a "planificar una Argentina multipolar, de polos productivos. Argentina debe construirse desde abajo y la planificación debe hacerse desde abajo, desde cada comuna municipio y provincia para construir un proyecto nacional, democrático e inclusivo", dijo ante el primero de las tres ovaciones que recibió en los 25 minutos que habló. en tono de campaña electoral.
Mirá tambiénEl nuevo sistema de turnos para sacar el DNI y el Pasaporte: en qué consiste y cómo utilizarloDe Pedro hizo una fuerte reivindicación de los gobiernos kirchneristas y recordó que entre 2003 y 2015, Argentina desarrolló una gran cantidad de obras de infraestructura: fibra óptica, el anillo de alta tensión, satélites, importantes inversiones en educación, tecnología, educación, rutas. "Terminamos obras que llevaban cuarenta años paradas como Atucha, hicimos la autopista rosario Córdoba. Era una Argentina con infraestructura, recursos nacionales, donde la gente podía desarrollar sus capacidades, con la autoestima de nuestro pueblo, con dirigentes y dirigentes que sabían a donde iba y por ahí no era conveniente".
"En 2015 se cortó un proceso de recuperación que era fenomenal -siguió-, habíamos vuelto a discutir en el grupo de los países que se estaban desarrollando y terminando un proceso de casi independencia económica, sin deudas, con capacidades productivas, discutiendo metalmecánica y satelitales a nivel mundial, desarrollando unicornios con la ley de economía del conocimiento. Ese proceso que reivindicó las mejores banderas del peronismo, de un nacionalismo sano y productivo se cortó en el 2015 y volvimos a un proceso de endeudamiento, importaciones, de priorizar el negocio de los gobernantes de algunas pequeñas industrias y empresas en post del deterioro interno la industria y el comercio nacional".
"Ese proceso se veía como que iba a ser para siempre porque sabían utilizar las fake news, las redes y porque tenían un acuerdo fuerte con Clarin y la Nación. Pero un día un gobernador dijo hay 2019 y ahi empezamos ciudad por ciudad, gremio por gremio, fabrica por fabrica a convencer, a poner en valor lo que se había hecho a pesar del bombardeo mediático que recibió Cristina, los gobernadores y el peronismo en general. Empezamos a recorrer el país a decirle a la gente que Macri no era el de Boca, sino que era el que conocemos desde hace 40 años, es el del Socma, el del Correo, las cloacas y las mafias organizadas en Argentina", dijo y se ganó la segunda ovación del día.
Finalmente, en tesitura de candidato y apelando a la mística -de hecho alguien le gritó Wado presidente-, De Pedro puso en contexto la situación actual que vive el país producto de la pandemia y las consecuencias de la guerra, llamó a los presidentes de comunas, intendentes y dirigentes a explicarlo; a salir a la calle a convencer a la gente porque "así como dijimos que hay 2019 vamos a decir que hay 2023 y va a ser desde cada municipio, desde cada comuna, desde cada empresa pyme, comercio y sindicato para que no vuelvan los que saquearon y fundieron el país y para seguir trabajando por una patria libre, justa, soberana, inclusiva y democrática para todas y todos".