Una historia entre Siria y Tucumán con el exilio como esperanza

Dos hermanos sirios llegan a la Argentina tras los pasos de su padre que años atrás salió de su pueblo en procura de una nueva vida. Son los últimos años del siglo XIX, tiempos de “hacerse la América” en un sitio desconocido, al que se imagina plagado de oportunidades pero que los acoge como extraños además de extranjeros.

Los muchachos llegan a la provincia de Tucumán. Y a partir de allí es un nuevo mundo el que se abre ante ellos. Un nuevo y desconocido mundo que se abrió también para Luis Arana, autor de “Las cuatro copas”, el libro de la paranaense Ana Editorial que presentará el próximo 6 de octubre en el Café del Molino (Bulevar Gálvez y Pedro Vittori).

Todas las preguntas que nos hacemos quienes conocemos apenas el inicio de esta novela son las que se planteó el autor cuando decidió ubicar en el espacio y el tiempo la historia de sus protagonistas. ¿Cómo fue el viaje? ¿Adónde se establecieron los hermanos? ¿Qué actividad desarrollarían en el país? ¿Se quedarían por un tiempo o toda la vida? ¿Tendrían descendencia? Y si fue así, ¿qué país vivieron sus propios hijos?

La historia transcurre entre los años 1896 y 1976, un período en los que nuestro país se transformó de todas las maneras posibles, hasta descender a la peor de las oscuridades. Y el hilo que atraviesa ese período es el exilio.

Arana comenzó a gestar esta historia en pandemia, cuando permaneció meses en su casa resguardado del Covid-19. Sin embargo, sus aprontes con la escritura vienen desde mucho antes. “En 2010 empecé un taller con Carlos Antoniazzi; fueron dos años en los cuales encontré otra forma de expresión a través de cuentos”. Luego llegó el taller de Sergio Ferreira (Temps era Temps) y una nueva chance de desarrollar esta forma creativa de expresión.

-¿Qué es “Las cuatro copas”?

-Durante la pandemia empecé con el bosquejo de esta historia de dos chicos sirios que venían a buscar a su padre a la Argentina adonde había llegado para procurarse una mejor oportunidad. Eso llevó a que se perdieron sus pasos porque se cortó la comunicación entre ellos. Como católicos maronitas, eran perseguidos y la madre junto con su familia tuvo que salir de su pueblo hacia Damasco, a la casa de sus parientes, pero no pudo llevar a todos sus hijos.

Así fue que los dos hermanos llegaron a la provincia de Tucumán donde no fueron tratados como europeos sino como inmigrantes de otros países que no eran bienvenidos. Eran sirios con ciudadanía otomana pero allí, como en muchos otros lugares, eran los “turcos”.

Todos los hechos narrados tuvieron que estar acordes a los acontecimientos reales de un país que registraba el desarrollo de los ferrocarriles, el auge de la comunicación y, para los protagonistas, el trabajo en una tienda que con el tiempo fue suya.

Pero todo transcurre también en una Argentina cambiante, de crecimiento, estabilización y caída, y una historia marcada por el año 1976.

En este contexto, el exilio es la marca que atraviesa la trayectoria familiar y la novela. Esa marca está presente en las frases que la preceden, tanto el proverbio árabe que dice “Hay una gran bendición en el traslado”, como la de Juan Pablo Duarte, dominicano exiliado en Venezuela: “Cuán triste, largo y cansado, cuán angustiado su camino señala el ente divino al infeliz desterrado”.

-¿Qué hay de ficción y qué de realidad en tu libro?

-La ficción es la historia de los hermanos, pero está basada en la realidad de la Argentina durante esos años. El eje central son las cuatro copas del título que aluden a un rito del que mucho no se puede revelar.

-¿Por qué estos personajes sirios?

-Siempre me preocupó la situación de los desplazados, de las personas que son dueñas de su casa y alguien las saca de su sitio y tienen que salir a buscar otro.

-¿Y si el libro llega a integrantes de esa comunidad?

-Es mi idea que les llegue.

La presentación

Esta es la primera novela y el primer libro de Luis Arana y ya tiene “dueños”: sus hijos Francisco y Mercedes a quienes está dedicado éste que, asegura, no será su único título.

“Las cuatro copas” será presentado el 6 de octubre a las 19.30 en Café del Molino (Bulevar Gálvez y Pedro Vittori). Allí estarán la escritora (y su maestra de primaria) Norma Batú, junto a Oscar Di Dío y Susana Tenuta. Claudio Hechim pondrá música al encuentro.

Al día siguiente, la presentación se trasladará a la Feria del Libro de la ciudad de Paraná.