Descubrieron un antepasado común del hombre y de los grandes monos


El Pierolapithecus catalaunicus vivió hace unos 13 millones de años. El hallazgo se produjo en España, en cercanías de la ciudad de Barcelona.

Un primate que vivió hace unos 13 millones de años, que podría ser el último antecesor común de los grandes monos y el hombre, fue descubierto en España por científicos locales, anunció la revista Science.

Este nuevo hominoide, descrito a partir de un esqueleto parcial bastante bien conservado, recibió el nombre de Pierolapithecus catalaunicus (mono catalán de Pierola), señala el informe de Science.

El hallazgo fue realizado por el científico español Salvador Moya-Sola, del Instituto de Paleontología Miguel Crusafont de Barcelona y sus colegas.

El nombre científico del primate se refiere a Hostalets de Pierola, una aldea cercana al lugar del descubrimiento, cerca de Barcelona, en el noroeste de España.

"Moya-Sola y su equipo encontraron un colmillo de forma inesperada. Una máquina excavadora estaba despejando el terreno para trabajar con mayor facilidad cuando el canino apareció entre la tierra removida", informó el diario El Mundo.

"Los buenos fósiles te encuentran a ti", exclamó el investigador al ver el colmillo. Luego, con gran paciencia e ilusión, los científicos desenterraron 83 huesos en perfecto estado de conservación.

La anatomía del pierolapiteco, así como su antigüedad, estimada entre 12,5 y 13 millones de años (época del Mioceno medio), sugiere que era "probablemente cercano" al último ancestro de los grandes monos actuales y de los humanos, destaca el artículo de Science.

Los grandes monos están integrados actualmente en tres especies africanas -el chimpancé común, el bonobo (antiguamente llamado chimpancé enano) y el gorila- y una especie asiática, el orangután.

"Si bien los fósiles anteriores presentaban una morfología primitiva, idéntica a la de los monos inferiores, el mono de Cataluña permite por primera vez estudiar un espécimen de formas modernas", explicaron los científicos.

Los restos hallados corresponden probablemente a un macho de unos 35 kilos. Por la forma de sus dientes, se trataba de un frugívoro.

Su tórax era grande y chato, los omóplatos estaban situados en la espalda (las de los otros monos estaban fijas en las costillas a ambos lados, como los perros), la parte baja de su columna vertebral era rígida y sus muñecas permitían una rotación bastante alta de la mano. Según los científicos, se trataba de un "gran escalador".

"Todas estas características anatómicas facilitan la postura erecta y permiten también subir a los árboles", destacaron los investigadores españoles en el artículo que se publicará en la próxima edición de Science.

No obstante, el pierolapiteco también presenta algunos rasgos más primitivos, como un rostro inclinado y dedos de las manos y de los pies más cortos con respecto a los grandes monos actuales.

El primate recién identificado debía suspenderse menos a menudo que sus descendientes, lo que sugiere -según los investigadores- que este tipo de locomoción característica de las especies actuales surgió posteriormente y quizás en varias etapas.

El investigador Moya-Sola sospecha que estas características anatómicas indican que "varios rasgos surgieron por separado y quizá más de una vez, en la evolución de los simios".

"Los rasgos típicos de homínido iban y venían, eran comunes en diferentes simios hasta que la selección natural empezó a descartar diseños poco útiles y se fue conformando poco a poco, a lo largo de millones de años lo que hoy es el hombre moderno, por una parte y los monos, por otra", explicó.

Según las últimas hipótesis, el hombre y los grandes monos continuaron evolucionando durante varios millones de años después del período de la existencia del Pierolapithecus catalaunicus.

Los últimos compañeros que permanecieron juntos durante la ruta de la evolución, los ancestros directos de los humanos y los chimpancés, se habrían separado hace 6 ó 7 millones de años.

El equipo de investigadores cree que el Pierolapithecus catalaunicus migró desde África a Eurasia. (Télam-SNI).