Murió Enrique Gorriarán Merlo

El ex líder del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), una de las organizaciones guerrilleras que actuó en la Argentina en los años '70, murió ayer en un hospital de Capital Federal, cuando iba a ser operado por un problema cardiovascular.

Enrique Gorriarán Merlo de 64 años, y quien desplegara su accionar en Argentina y América Central, fue uno de los ejecutores del dictador nicaragüense Anastasio Somoza Debayle, y hace 17 años protagonizó un sangriento ataque a un cuartel del Ejército.

El director del nosocomio en el que era asistido confirmó que iba a ser intervenido de urgencia por un aneurisma disecante de aorta. El médico indicó que el ex jefe del ERP había llegado en una ambulancia y poco después entró en estado de shock, que le produjo un paro cardiorrespiratorio. Se le iniciaron maniobras de reanimación para sacarlo de ese estado pero no tuvieron resultado positivo y falleció. Gorriarán Merlo había ingresado antes al Hospital Fernández en un estado de importante descompensación, y le diagnosticaron aneurisma de aorta torácica abdominal. Después lo trasladaron al Argerich, donde falleció.

Su historia

Gorriarán Merlo nació el 19 de octubre de 1941 en la ciudad bonaerense de San Nicolás. En su juventud estudió Ciencias Económicas pero incursionó rápidamente en política hasta que llegó a ser miembro de la conducción del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT). Precisamente en un congreso del PRT se dispuso la creación del ERP, que se convirtió en el virtual brazo armado de esa agrupación política de orientación marxista.

El "foquismo" guerrillero urbano y rural y posturas casi inflexibles caracterizaron a la organización -también calificada de guevarista-, que fue liderada por Gorriarán Merlo, Mario Roberto Santucho, Arnold Kremer (Luis Mattini), Domingo Mena y Benito Urteaga. Santucho, Urteaga y Mena fueron eliminados por la dictadura militar y sus restos aún no aparecieron.

En 1971 Gorriarán fue preso y lo mandaron al penal de Rawson. En 1972 protagonizó una fuga del penal de Trelew con compañeros suyos y dirigentes de otras organizaciones guerrilleras, como los Montoneros peronistas, episodio tras el que fueron fusilados varios de los presos políticos allí alojados, en lo que se conoció como la "Masacre de Trelew".

El ERP actuó en dictadura pero también durante el gobierno democrático surgido en las elecciones de 1973. Una de sus características fue el ataque a unidades militares. Después de su actuación en la Argentina, Gorriarán se fue a Nicaragua, donde se integró a fuerzas revolucionarias de ese país. Allí actuó en tareas armadas y de inteligencia y participó en la ejecución del llamado "Comandante Bravo" (Pablo Salazar), lugarteniente de Somoza.

Con el regreso de la democracia en la Argentina fue uno de los fundadores del Movimiento Todos por la Patria (MTP). La agrupación realizó actividades políticas dentro de la legalidad hasta que sorpresivamente, en 1989, en las postrimerías del gobierno de Raúl Alfonsín, varios de sus miembros, fuertemente armados, coparon el cuartel del Ejército de la localidad bonaerense de La Tablada. Gorriarán logró huir y en octubre de 1995, cuando residía en México, fue detectado y detenido en la ciudad de Tepostlán. Extraditado a la Argentina, fue juzgado por ese episodio y recibió cadena perpetua, pero en mayo de 2003 fue indultado por el entonces presidente Eduardo Duhalde.