Sucesos: SUCE-06

Investigan apremios en la comisaría segunda


El juez de Menores de la Primera Nominación, Julio César Rogiano, tomó declaración a tres menores que permanecieron detenidos en la comisaría segunda, uno de los cuales habría sido apremiado.

La denuncia radicada ante el juez de Instrucción en turno, Roberto Prieu Mántaras, puso de relieve que un joven mayor de edad y un menor de doce años habían sido golpeados mientras estaban detenidos en la citada dependencia policial.

Según trascendió, el mayor de los agredidos es un peón de albañil que circulaba a bordo de un ciclomotor de su propiedad cuando fue detenido por uniformados que sospecharon que el vehículo era robado.

De hecho, la moto estaba a nombre del tío del detenido, aunque para cuando las cosas se hubieron aclarado y el joven recuperó su libertad, habían transcurrido ya ocho penosas horas para el trabajador.

La Justicia investiga la presunta comisión de apremios ilegales contra el joven mayor de edad, quien recibió un fuerte golpe en la cabeza, por lo cual se ordenó su revisión en el hospital José María Cullen.

Un médico forense constató también lesiones en un menor de 12 años, que estuvo detenido junto a otros dos de 13 años en la misma dependencia policial.

Sin embargo, aún no queda claro si el chico fue golpeado mientras estuvo alojado en la comisaría o si recibió antes los golpes, a manos de un guardia de seguridad privada.

Los tres chicos estaban sospechados de haber sustraído golosinas de un kiosco, razón por la cual un patrullero los detuvo cuando dormían en la plaza ubicada frente al ferrocarril Mitre.

El médico forense constató que el niño de 12 años -cuya apariencia física corresponde a la de un chico varios años menor- había recibido golpes en la nariz y pómulo izquierdo, aunque la víctima asegura que también "me dieron una patada en el c...".

Los otros dos menores que lo acompañaban, de 13 años de edad, no presentan signos de haber sido golpeados.

El sumario administrativo iniciado fue remitido al juez de Instrucción de la Octava Nominación, quien recibió declaración al joven mayor de edad que denunció las agresiones.

Durante un allanamiento realizado en la dependencia policial, los investigadores hallaron restos de sangre fresca en el piso de una habitación.

La medida, que se prolongó por cuatro horas y contó con la presencia del juez Prieu Mántaras y personal de Asuntos Internos, puso en evidencia el asentamiento de datos falsos en el libro de guardia, así como de algunas situaciones que no quedaron debidamente registradas.

La seccional segunda está a cargo del comisario Carballo, el mismo funcionario policial que meses atrás denunció haber sido privado de su libertad, maniatado y esposado a las rejas de una celda por delincuentes que acababan de asaltar una armería de Gálvez.

Dado que la investigación judicial se encuentra en sus comienzos, el personal de la comisaría aún no ha sido citado a prestar declaración indagatoria.