Titulares de Tapa: TAPA-02

Crece la drogadicción entre
chicos de barrios marginados


Archivo El Litoral. A SÓLO DOS PESOS. A este precio se consigue el pegamento fraccionado en algunas barriadas santafesinas.

Desde muy pequeños tienen el pegamento al alcance de la mano. Es preocupante el crecimiento de consumo que se registra en los barrios del noroeste de la ciudad.


La falta de expectativas y de perspectivas, la casi nula posibilidad de inserción en el mundo laboral, la escasa contención familiar y educativa y un pasado relacionado en casi todos los casos con la mendicidad y el trabajo en la calle, son algunos de los disparadores que acercan a los menores -cada vez más chicos- al mundo de la drogadicción como una vía de escape.

Las edades son alarmantes. Si bien el promedio comprende a niños que están ingresando en la adolescencia (12 años), se dan casos extremos de pequeños de sólo 8 años que ya inhalan pegamento.

Algunas consultas realizadas por este diario a fuentes que van desde el ámbito judicial hasta el trabajo social y barrial, aseguran que en la ciudad hay un grupo de chicos en estado semi abandónico que deambula por las calles sin ningún tipo de contención. Pero afirman que pertenecen a no más de una treintena de familias que están perfectamente determinadas.

En San Agustín II, uno de los populosos barrios del noroeste, la problemática es preocupante. Un vecino del lugar que desde hace 15 años brinda la copa de leche a los pibes del barrio, dijo a El Litoral que ``si bien es difícil hablar de porcentajes, son muchos los chicos que se drogan y podríamos decir que un 30% de los jóvenes de 12 años para arriba consume drogas con distinta intensidad en San Agustín II''.

Pero algo aún más preocupante es la facilidad con la que los chicos acceden a este elemento. Cualquier adulto tiene la posibilidad de comprar 4 litros de pegamento a bajo precio, y así, unos pocos gramos son ofrecidos en los barrios a sólo 2 pesos.

(ÁREA METROPOLITANA)