Con un tiro en la nuca fue ejecutado un joven, posiblemente un menor de edad, en las calles del barrio Los Angeles. Del grave suceso se tuvo noticia anoche, poco después de las 23. El chico muerto, al que la policía no logró identificar todavía, tiene tatuada en la espalda una imagen de Jesucristo.

Por lo demás, vestía pobremente: pantalón verde, buzo azul con capucha, zapatillas negras y medias rojas, completaban su indumentaria.

Fuentes de la Unidad Regional I dijeron que el occiso era delgado y medía 1,65 m. de estatura. Tenía piel trigueña y cabellos cortos, negros.

Los vecinos dijeron anoche a los cronistas de este diario que no escucharon más que uno o dos estampidos de armas de fuego, pero no alcanzaron a ver nada de cuanto ocurría en medio de la calle, ya que por lo avanzado de la hora y la inminencia de la tormenta, en su gran mayoría se habían retirado a descansar.

Un poco antes de este crimen se había suscitado un feroz enfrentamiento armado en el barrio Las Lomas. Allí dos bandas rivales dirimieron a tiros sus diferencias y el saldo fue el de un menor, de 15 años, gravemente herido.

La policía detuvo a ocho hombres, cuatro mayores y otros tantos, menores de edad, con relación a este incidente. También, cuando cesaron los disparos, los uniformados lograron secuestrar numerosas armas de fuego -revólveres y escopetas-, todas de grueso calibre.

(SUCESOS).