Fue una fiesta, y cualquiera de las personas que asistió ayer a la jornada inaugural de la sede Santa Fe del Mundial de Vóleibol Argentina 2002, lo puede corroborar. Sin estar repleto, el estadio Angel Malvicino, mostrado al mundo en directo por la cadena televisiva ESPN, estaba lleno (lo que ya significó un éxito), y se generó un clima muy participativo de la gente con el espectáculo.

Las colectividades de Croacia (vinieron especialmente desde Rosario), Polonia e Italia, marcaron su presencia en el estadio e hicieron una demostración de hospitalidad pocas veces vista. Se identificaron con los colores del país a través de banderas (algunas muy grandes, como la de Croacia), remeras, se pintaron la cara y alentaron en el idioma correspondiente. Eso provocó que las tribunas fueran un espectáculo en sí, que luego cobró más vida con la banda "Santa Fe Mundial", que se instaló en la popular para darle ritmo a una jornada extenuante, pero sumamente entretenida, que se extendió desde las 15.30 (hora que la gente empezó a entrar al estadio) hasta las 22.30 que terminó el último partido.

Estaba programada a las 16, y a las 16.05 la mascota del mundial "Minto", la murga Puro Teatro y la batucada Emperatriz, abrieron el desfile, donde luego entraron las banderas y los representantes de las colectividades con sus coloridos atuendos típicos.

La ceremonia fue sencilla, pero a veces la sencillez refleja belleza y en este caso la tuvo.

Siguió una secuencia de bailes típicos de los cuatro países, mezclados con danzas tradicionales argentinas. Todo fue dinámico -uno tras otro-, los bailarines entraban, regalaban gracia, movimiento y colorido, para dar paso a otro ballet.

Si algo se pudo apreciar en esta ceremonia fue que la gente de Santa Fe es receptiva a este tipo de espectáculos, sólo que rara vez pueden combinar en un mismo momento tanta variedad.

Aplaudieron los bailes típicos, pero el tango arrancó el mayor reconocimiento de la gente con una demostración magnífica de los bailarines.

La vestimenta fue impecable y la musicalización sin fallas.

Luego todos se cambiaron sus atuendos por las remeras del Mundial para hacer una coreografía alrededor de la cancha; y mientras un grupo de niños de minivóleibol jugaban con pelotas, repentinamente otro grupo desplegó varias banderas multicolores que cubrieron toda la cancha, con un efecto visual impactante y emotivo por su significado.

Rápidamente todos dejaron la cancha, tras una hora de actuaciones que el público disfrutó de principio a fin por lo entretenida que fue: una combinación ideal, sin extravagancias ni tecnologías, pero con el reflejo de que en Santa Fe hay gente con ganas de hacer las cosas bien y por eso estuvo perfecto.

Mario Goijman eligió inaugurar la sede Santa Fe, entre las cinco que ayer dieron inicio al resto de los grupos.

"Cómo no iba a venir, siempre vengo a Santa Fe, pasé a cada rato en los últimos meses, justo hoy (por ayer) el día de la fiesta no iba a estar", dijo el máximo dirigente del vóleibol nacional, evidentemente feliz tras concretar su objetivo mundialista.

"Salió todo perfecto, la ceremonia estuvo muy bien, los felicito a todos y a la gente por acompañarnos", expresó.

Goijman quien ha tenido entredichos con la gente de la Federación Internacional por sus constantes "exigencias", dijo al ser consultado sobre este tema que "si todavía están buscando una falla, no la van a encontrar".

Y con respecto a la selección argentina opinó que "en el debut estaban sumamente nerviosos, creo que van a mejorar con el transcurrir de los partidos".

Predio exposición Santa Fe Mundial en la rotonda de Unión.

Banda Municipal de la ciudad de Santa Fe (15)

En el estadio

Instituto Coral de la provincia; Ballet de tango argentino (16.15).

Grupo de competición de Gustavo Lauto (17.10).

Paula Irigoyen ( mimo-saxo).

Batucada Santa Fe Mundial.

Primer partido

Polonia-Italia (18)

Entre partido grupo competición de Gustavo Lauto.

Segundo partido

Canadá-Croacia (20.30).

Entradas en el estadio de Unión a 10 pesos las populares y 20 las plateas.