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Grassi se alejó del Colegio de Guadalupe

El Litoral. Renuncia. El vicario episcopal para la educación, padre Mario Grassi, comprometido en el escándalo que envuelve a monseñor Storni, ya dejó la representación legal del Colegio Nuestra señora de Guadalupe.

Abandonó la representación legal del establecimiento. La renuncia, hasta aquí verbal, se hará efectiva cuando le sea aceptada la renuncia a monseñor Storni. Prometió a las autoridades no intervenir en ese lapso en la vida de la escuela.


Este fin de semana se conoció la renuncia verbal del presbítero Mario Grassi a su cargo de representante legal del Colegio Nuestra Señora de Guadalupe. Así lo señalaron en un comunicado los padres autoconvocados del establecimiento, quienes piden la formalización por escrito de la dimisión.

Grassi se comunicó telefónicamente con personal directivo del colegio a quien "le expresó su voluntad de retirarse del establecimiento, lo que se hará efectivo cuando sea aceptada la renuncia a Storni en el Vaticano", lo que traería aparejado el alejamiento de sus principales colaboradores, entre ellos el padre Grassi, quien ocupa el cargo de vicario episcopal para la Educación, explicó uno de los padres autoconvocados.

Hasta tanto eso suceda y por razones de funcionamiento, "el sacerdote seguirá firmando como representante legal del colegio, aunque manifestó su voluntad de no tomar ninguna decisión que tenga que ver con la línea pastoral ni de realizar actividad alguna dentro de la escuela. Nosotros queremos que esa intención sea puesta por escrito", señaló el padre consultado.

Grassi está involucrado, junto a otros sacerdotes de la Iglesia santafesina, en una causa que se tramita en el Juzgado de Julio César Costa por la presunta comisión de los delitos de amenazas, coacciones y privación ilegítima de la libertad en perjuicio del padre José Guntern.

Amenazas


Los padres autoconvocados también expresaron su "beneplácito" por la noticia de la renuncia presentada por Edgardo Gabriel Storni ante el Vaticano y hacen votos "porque la misma sea aceptada y este sacerdote quede inmediatamente a disposición de la Justicia santafesina".

Por otra parte, repudiaron las amenazas telefónicas que recibió un padre miembro de este grupo junto a su familia, e informaron que las mismas fueron denunciadas ante la Justicia. La semana pasada, la hija de la persona en cuestión atendió un llamado donde se le advertía que su padre debía tener mucho cuidado con lo que estaba haciendo. Cabe destacar que los padres autoconvocados de Guadalupe vienen realizando una serie de actividades en favor del esclarecimiento del caso Storni y pidiendo la separación de Grassi del colegio.

A pesar de este hecho intimidatorio, el grupo continuará reuniéndose los sábados a las 15.30 en el Club Banco Provincia y anuncia para el próximo 16 de octubre, a las 15.45, un abrazo solidario al colegio y a la Basílica de Guadalupe, recordando el cuarto mes de la desaparición física del Padre Trucco.

"Cualquiera sea el final de este proceso continuaremos trabajando, buscando el bien desde el compromiso y la responsabilidad", culmina el comunicado.