"La investigación científica es un reto", consideró uno de los graduados convocados en el VI Encuentro de Jóvenes Investigadores de la UNL, que con singular éxito se desarrolló el pasado jueves en la Facultad de Ciencias Económicas. Y el desafío fue aceptado por muchos becarios, pasantes y egresados de no más de dos años de graduación, que sumaron sus esfuerzos y presentaron sus proyectos de investigación, muchos de ellos convencidos de que será la ciencia el camino que les depare su profesión.

Fueron 160 trabajos los que se presentaron a la convocatoria, superando el número alcanzado en la última edición del encuentro, que fue nacional y sumó a participantes de todo el país.

"En un año tan difícil como el actual, que se hayan presentado 160 trabajos demuestra que la Universidad del Litoral sigue poniendo énfasis en la formación de nuevos recursos humanos y en el despertar de nuevas vocaciones científicas", analizó el ingeniero Julio César Theiler, secretario de Ciencia y Técnica de la UNL, quien manifestó su esperanza de que sean los nuevos profesionales "los que marquen el nuevo rumbo del país".

Matías cuenta los meses para recibirse de ingeniero químico el año que viene. Y espera que todo su esfuerzo se vuelque en la investigación científica, "una vocación que tengo desde que soy chico".

"Así como a otros les interesa la medicina, a mí me gusta estar en los laboratorios, responder por qué pasan o no las cosas y de esta manera aportar una solución concreta", indica, mientras explica detalladamente cómo eliminar los contaminantes de los motores diesel, el objetivo central de su proyecto.

Su esperanza de continuar desarrollando su carrera en investigación encuentra el mismo obstáculo que la de muchos otros jóvenes reunidos en el encuentro: las dificultades económicas. "Es mi anhelo seguir en la investigación, aunque entiendo que es muy difícil. La carrera de investigador requiere un muy buen nivel académico, conocimiento de idiomas, antecedentes y concursa mucha gente de todo el país", indicó.

Claudia es estudiante avanzada de Bioquímica, y a partir de una pasantía realiza docencia e investigación, algo que -espera- sea su medio de vida en el futuro. "Me parece útil aplicar la investigación a la docencia guía de evaluación de la acción docente. Y si fuera posible me gustaría seguir en esta rama de la profesión, aunque eso depende de las opciones que me den tanto la facultad como la universidad. Me gusta mucho esta área, pero creo que es difícil encontrar certezas que nos ayuden", explicó.

Horacio es ingeniero agrónomo e integra como pasante el grupo de Economía, Mercadeo y Administración de Organizaciones. Para él, "hacer investigación es un reto, es tratar de encontrar soluciones con tecnologías nuevas frente a un montón de problemas que surgen. Son desafíos que tanto el grupo de trabajo como nosotros en particular nos proponemos solucionar con alternativas que sean de utilidad científica para los productores o para quienes estén interesados. Es la finalidad del grupo de trabajo y creo que de toda investigación: generar tecnología, tanto de productos como de procesos".

En ese marco, surge la inquietud de continuar trabajando en investigación, pero también la dificultad más reiterada: "La investigación no es nuestra fuente principal de ingresos; somos pasantes ad honorem. Ojalá podamos seguir en la investigación, que es lo que nos gusta, pero todo depende de lo que nos depare el futuro", indicó Horacio, reconociendo lo "difícil que es trabajar en investigación y repartir tu tiempo con una ocupación rentada".

Marianela, estudiante avanzada en Biotecnología, considera que "la investigación es un sueño que espero poder realizar. Pero sobre todo -indica- pretendo encontrar en el país la posibilidad de que se abran las puertas y poder vivir de esto. Me produce mucha satisfacción descubrir cosas y probarse uno mismo; ver que uno puede lograr nuevos conocimientos. Demanda mucho sacrificio, pero a la vez otorga muchas satisfacciones, tanto intelectuales como personales".

En un contexto de crisis como el actual, la universidad debe dar respuestas claras, y una de esas respuestas está en la producción del conocimiento científico: "Si se considera que la crisis argentina es principalmente política, y que los argentinos debemos encontrar el camino para resolverla, el futuro para estos jóvenes investigadores será interesante, y para el país es su masa crítica fundamental: es la nueva generación que forjará un país mejor que el que estamos viviendo hoy", indicó el secretario de Ciencia y Técnica, de la UNL, Julio Theiler.

"El desafío -agregó- es tratar de resolver esta crisis política lo más rápido posible, a los efectos de que estos recursos humanos no tengan que emigrar como lamentablemente hoy está ocurriendo. Creo que resuelta la crisis política, la Argentina entrará en una etapa de franco crecimiento; tenemos un país para eso, una sociedad ilustrada y educada y una tierra rica: estos jóvenes van a construir el desarrollo del país".