El intendente rosarino, Hermes Binner, consideró en una primera lectura que los resultados electorales son para festejar. "Lo importante es que en Rosario y en la provincia los votos no recurren al pasado sino al porvenir", sostuvo, satisfecho por el desempeño de Elisa Carrió, quien obtuvo resultados que la encumbraron en toda la provincia.
El optimismo de Binner se debe a que el electorado que se inclinó por Carrió es al que apelará cuando se lance a la carrera por la Gobernación. Y aunque no lo dijo públicamente el mayor referente del socialismo en la provincia cuenta con el apoyo explícito de la dirigente del ARI para aquella empresa: Carrió se cansó de elogiarlo como el mejor candidato para gobernar Santa Fe.
No obstante Binner, como socialista, ayer sufrió una derrota contundente. Tuvo que afrontar que el electorado de centroizquierda optara, de manera abrumadora, por la fórmula del ARI en claro desmedro de la socialista, que quedó completamente rezagada a nivel local. Lo que implica un regusto amargo adicional porque el PS rechazó formar una coalición con los seguidores de la diputada nacional chaqueña. "La gente buscó una opción ganadora. Pero nosotros, el socialismo, somos un partido nuevo; hicimos una campaña con poco dinero y mucho esfuerzo. Y estamos organizados en todos los distritos", señaló Binner. Quien recordó que miraba el futuro con optimismo a partir de la marca que dejó Carrió. "Es importante tanto para Rosario como para la provincia porque en definitiva son votos que quedan en el espacio progresista".
