Un incidente tan confuso como violento protagonizaron hoy varios piqueteros que cortaban el tránsito en avenida Fray Cayetano Rodríguez y calle Brasil, con los ocupantes de un automóvil que pretendieron sobrepasar una barricada.

Poco antes de las 11 vecinos de distintos barrios del oeste santafesino comenzaron a quemar cubiertas en las avenidas Perón, Blas Parera y Fray Cayetano, en reclamo de materiales para reparar sus viviendas dañadas por la inundación.

Como suele ocurrir, la medida dio lugar a enojosas situaciones que involucraron a manifestantes y conductores de vehículos interceptados y desviados de su recorrido, en los alrededores del Cementerio Municipal.

En tales circunstancias, Agustín Cámpora, el director del Mercado Concentrador que en compañía de una mujer iba al volante de Ford Sierra, salió de la avenida Perón. El empresario buscó un atajo por calle Artigas e ingresó en contramano por Brasil, pero al llegar a Fray Cayetano Rodríguez, tropezó con un nuevo obstáculo al que intentó sortear, más aún cuando un grupo de piqueteros le cerró el camino.

Qué ocurrió entonces no es fácil de explicar, pero lo cierto es que Cámpora dejó el rodado y se trabó en una áspera discusión que derivó en forcejeos y golpes de puño. Tal fue la violencia del momento que una mujer que estaba entre los piqueteros cayó pesadamente sobre el pavimento.

Esto último hizo que otras numerosas personas corrieran en dirección al lugar del hecho. Entonces, Cámpora regresó a su automóvil y lo puso en marcha mientras la mujer que lo acompañaba abría fuego desde la ventanilla con un arma de grueso calibre.

Acto seguido, los patrulleros de la Unidad Regional I salieron tras el automovilista y algunos metros más adelante lo alcanzaron, ordenándole que se dirigiera a la Seccional 6a. de policía.

Ya en la comisaría, Cámpora y su acompañante -que presentaba algunas lesiones en el rostro-, quedarían bajo arresto preventivo al igual que media docena de piqueteros que llegaron tras él para denunciar lo sucedido.

En tanto, algunas de las personas que aún después del incidente mantenían el corte sobre calle Brasil, dijeron a los cronistas de este diario que una mujer apellidada Suárez -presuntamente agredida por Cámpora-, había sido llevada en dirección al hospital José María Cullen, ya que ésta habría sufrido algunas fracturas en la mano derecha.

En sede policial, fue secuestrada el arma accionada por la mujer que acompañaba a Cámpora, un revólver Shmit Wesson 38 largo y también se pudo ver que el automóvil en el que éstos se conducían presentaba algunos daños, como la destrucción de la luneta trasera.

Se calcula que los disparos hechos por la mujer fueron cuatro, pero hay que decir que afortunadamente los proyectiles -que unos dicen que fueron disparados al aire y otros al cuerpo-, no alcanzaron a herir a nadie.