Sucesos: SUCE-01

Dos delincuentes muertos tras un sangriento asalto en zona norte

Una vez concretado el golpe, la policía "cerró" las salidas de la ciudad. Así pudo apresar a dos de los rufianes en el acceso a barrio El Pozo. FOTO: DANILO CHIAPELLO.. 
Ocurrió en una distribuidora de productos del barrio La Esmeralda. Cuatro rufianes fueron los que arremetieron contra el comercio. Uno de los sujetos murió alcanzado por un disparo cuando se trabó en lucha con el dueño del local. El otro malviviente fue hallado sin vida en la costa del río Salado.


Una distribuidora de productos resultó blanco ayer de un tan violento como dramático asalto -incluyó a niños tomados como rehenes-, el que dejó como saldo dos malvivientes muertos y otros tantos capturados por la policía.

El grave episodio ocurrió en la siesta de la víspera y tuvo lugar en el comercio Blanca inocencia, ubicado en Alfonsina Storni al 2700, esto es, en el extremo norte de la avenida Aristóbulo del Valle.

Aproximadamente a las 15, cuatro sujetos que se conducían a bordo de un Peugeot 504, de color azul, estacionaron el coche en las cercanías al local, en un camino de tierra.

Los ocupantes del vehículo estaban con los rostros descubiertos y, de acuerdo con los dichos de testigos, vestían pantalones y camisas de grafa. "Cualquiera pudo confundirlos con hombres de trabajo", dijo hoy uno de los vecinos entrevistados.

Víctima inocente


En la puerta del comercio se encontraba una niña de 5 años, familiar de los propietarios de la distribuidora. Uno de los sujetos fue quien, de manera "inocente", se acercó a la criatura y le preguntó si alguien podía venderles masitas.

Ni bien la niña hizo unos pasos, el rufián la alzó con un brazo y con la otra mano le tapó la boca. De este modo, el individuo hizo su "presentación" para ingresar al negocio.

Quien se topó con esta horrenda escena fue la encargada del local, una mujer de 42 años. Sin mediar mayores trámites, el ladrón tomó de los pelos a la mujer y la llevó hacia la parte posterior del inmueble, donde se ubica la casa de familia.

Al límite de todo


Ya en este sector el rufián indicó a los gritos que quería: "íLa plata, la plata!". Pero fue en esos momentos que una adolescente, de 15 años, se sumó a la escena.

Entre idas y vueltas, la jovencita se las ingenió para pasar en medio del ladrón y la mujer, liberar a la niña y dar cuenta de lo que estaba sucediendo a su padre que se encontraba durmiendo.

Apenas se asomó a la cocina, el dueño de casa observó la dramática escena. Uno de los malvivientes le tiró toda su humanidad encima y se trabaron en lucha.

Fue en esta circunstancia que el estampido de un disparo retumbó en toda la casa. Acto seguido, el rufián abandonó la pelea y con paso vacilante se dirigió hacia la puerta del comercio.

Mientras tanto, su compinche también había decidido retirarse de la escena, aunque para ello se llevó en brazos al hijo de la mujer -también de 5 años-, a quien retuvo varios minutos.

Desesperada, la madre se lanzó a la carrera para recuperar al chico. Como respuesta, el rufián abrió fuego reiteradas veces y sólo por la buena fortuna -y la mala puntería- la mujer salió ilesa.

La primera parte de la pesadilla hubo de terminar poco después, cuando el sujeto liberó al niño y ascendió al coche donde lo esperaba su compinche, para darse a la fuga.

Mientras tanto, el ladrón que había sido baleado alcanzó a recorrer unos metros por la vereda, se abrazó a un pequeño árbol y, finalmente, se derrumbó ya sin vida.

Este sujeto fue identificado luego como Néstor Fabián Villalba, de 25 años, domiciliado en el paraje El Bañado, del distrito costero de La Guardia.

Persecución


Puesto el hecho en conocimiento de la policía, se montó un operativo que incluyó el cierre de todas la rutas y caminos de acceso a y salida de la ciudad.

Este proceso dio sus frutos poco después, cuando una patrulla advirtió el paso del Peugeot 504 por la ruta nacional N° 168, a la altura de la Fuente de la Cordialidad.

Sin más, los uniformados iniciaron una persecución que llegó hasta el puente de ingreso al complejo habitacional de El Pozo, donde pudieron darles alcance y capturarlos.

En el interior del coche iban dos de los delincuentes, quienes serían un tal Rota, de 25 años, y otro de apellido Ortíz, de 29.

Sorpresa y media


Pero las novedades no terminaron aquí, por cuanto los asaltantes, al ser interrogados por la policía, confesaron que un segundo compinche había sido dejado sin vida en la costa del río Salado, en el extremo oeste del barrio Las Lomas.

Hasta allí llegó una comisión y confirmaron la versión. En un camino desolado hallaron el cadáver de quien sería Félix Villalba, de 52 años, con domicilio en el partido de Dock Sud, provincia de Buenos Aires.

Ahora es objeto de la investigación establecer cuándo y cómo fue que el último mencionado perdió su vida.

Venían "cebados"


Con la información recabada hasta ese momento, agentes de Seguridad Personal decidieron allanar el domicilio del sujeto oriundo de La Guardia, donde encontraron más sorpresas.

En el interior de la casa había armas de fuego de grueso calibre y un cargamento de cigarrillos, producto de un asalto que habían cometido durante la mañana.

Víctima de ese hecho resultó ser Juan Borgio, de 37 años, oriundo de Santo Tomé, a quien le sustrajeron dinero en efectivo y un cargamento de 250 cartones, en momentos que visitaba un kiosco de la zona.