La falta de reparación de los vehículos y de elementos de seguridad de la Brigada Motorizada de Tránsito de la Municipalidad obligaron a los agentes que integran la división a movilizarse a pie. Así lo hacen desde el viernes y en esa situación siguen al menos durante este fin de semana, hasta que finalicen los trabajos de mantenimiento en las motos.
"El parque automotor está bastante deteriorado", admitió el director de Tránsito Ricardo Simón, aunque aclaró que "los controles se hacen igual". De hecho, el jueves se hicieron mediciones de alcoholemia y la tarea continuó el fin de semana.
Lo que es imposible de obviar es que la operatividad de la brigada, que se traduce en la rapidez para acudir ante un incidente, no es la misma.
De acuerdo a lo explicado por el funcionario "no se han podido reparar algunos vehículos y, por seguridad, se tomó la decisión de que las motos no salgan, aunque el personal sí está en la calle".
En cuanto a las perspectivas para que los arreglos se realicen, reveló que la solicitud de compra ya está por lo que se espera normalizar la situación en el transcurso de la semana.
En todos los turnos, son unos 50 agentes los que integran esa división de Tránsito.
El deterioro del parque automotor y la insuficiente cantidad de vehículos aptos para prestar los servicios fundamentales es reconocido desde hace tiempo por el municipio. No es ésta la primera vez que se condiciona una prestación a la falta de recursos: hace algún tiempo la reparación del alumbrado público se vio condicionada por la falta de combustible para los camiones.
