Mercosur-UE buscan negociaciones

El Mercosur y la Unión Europea prevén mantener a finales de marzo una reunión de coordinadores que serviría para reanudar las negociaciones para un acuerdo comercial que están estancadas desde octubre.

Entre el 20 y el 24 de marzo, los jefes negociadores se encontrarán para preparar una reunión ministerial con fecha aún no fijada pero que las partes se comprometieron a mantener durante el primer semestre de 2005 en Asunción.

"En la reunión ministerial", los europeos esperan "ver la verdadera disposición que existe para retomar las negociaciones", ya que ellos tienen buena voluntad.

El Mercosur quiere que la UE le permita exportar más productos agrícolas, principalmente, carne bovina y otras, por medio de mayores cuotas de importación.

A cambio, los europeos quieren del Mercosur una legislación que de a sus empresas igualdad frente a las locales y seguridad jurídica en servicios e inversiones y acceso a las compras públicas, así como el respeto de las denominaciones de origen y una liberalización mayor del mercado industrial.

En el mes de octubre, ambos bloques decidieron posponer la fecha de conclusión de las negociaciones por considerar insuficiente el grado de liberalización comercial alcanzado tras cinco años de tratativas.

El último contacto entre las partes fue la reunión que hubo entre el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, y los comisarios europeos de Comercio y Agricultura, Peter Mandelson y Mariann Fischer-Boel, hace un mes, al margen del Foro Económico de Davos, en Suiza.

Pedido

La semana pasada, el ministro español, Miguel Angel Moratinos, expresó a sus pares europeos la preocupación de su gobierno por el estancamiento de las negociaciones comerciales entre la UE y el Mercosur y pidió a la Comisión Europea, encargada de negociar, que reactive los contactos para firmar un acuerdo.

Hace un mes, el secretario de Agricultura, Miguel Campos, pidió a la Comisión Europea un mayor acceso al mercado agrícola europeo para el Mercosur y a cambio ofreció la no utilización por parte del bloque de las denominaciones de origen del viejo continente para productos como vinos, quesos o embutidos tradicionalmente producidos en Europa, pero cuyos nombres también son usados en los países del bloque sureño, como el Rioja o el parmesano (DyN).