Cuestionan la destreza de William Blake como grabador
EFE

Una historiadora de arte ha hecho trizas la fama de destreza como grabador del famoso visionario y artista británico William Blake (1757-1827).

Blake solía ufanarse de que no hacía correcciones en sus grabados, muchos de ellos ilustraciones de sus libros de inspiración mística, entre los que destacan sus "Cantos de Inocencia y Experiencia", "El Libro de Job", "Milton" o "Jerusalén".

Con fama de excéntrico, Blake era famoso por el tiempo que empleaba en terminar una obra, en la que siempre aspiraba a la perfección.

En cierta ocasión afirmó: "Cada línea es la línea de la belleza", para criticar, acto seguido, "la chapuza incapaz de trazar una línea".

Pero, como ha descubierto Mei Ying Sung, de la Universidad de Nottingham Trent, al estudiar en diversas colecciones de Europa y EE.UU. el dorso de una treintena de planchas de cobre utilizadas por Blake, éste se vio obligado a corregirse muchas veces.

Según informa el diario The Guardian, Blake rehízo muchos de esos errores, batiendo la plancha por detrás para conseguir de nuevo una superficie plana en la que poder hacer nuevas incisiones.

Para David Worrall, también experto en la obra de Blake, éste se preocupó muy especialmente de ocultar los problemas que tenía con el grabado porque estaba muy orgulloso de su reputación de virtuosismo en ese arte, en el que se comparaba favorablemente con los mejores.

La historiadora que descubrió los errores y tanteos de Blake dice que no por ello ha dejado de admirar al artista, cuyas ilustraciones del Libro de Job son, en su opinión, "la última obra maestra en la historia del grabado".

Blake es famoso por haber inventado una técnica especial de aguafuerte en relieve que, según dijo, le había enseñado en sueños su hermano muerto.

Desgraciadamente, sólo se conserva un fragmento de una de las planchas utilizadas para esos aguafuertes frente a varias docenas de las que empleó para los grabados al cobre, que se guardan en colecciones que van desde el Museo Británico hasta las universidades de Yale y Harvard, en Estados Unidos.