El gobierno argentino desmintió hoy una versión periodística difundida en Uruguay que daba cuenta de la decisión del Banco Mundial de financiar parte de los costos de dos plantas papeleras en territorio uruguayo.
El secretario de Asuntos Ambientales Internacionales de la Cancillería argentina, Raúl Estrada Oyuela, salió al paso de la información. El funcionario aclaró que la posible fuente de financiación de las papeleras que la empresa española Ence y la finlandesa Botnia pretenden construir en Uruguay es la Corporación Financiera Internacional (CFI), entidad que depende del Banco Mundial (BM).
"El lunes o a más tardar el martes próximo la Corporación Financiera publicará en su página en Internet el proyecto de informe de impacto ambiental que durante 60 días se discutirá entre todos los sectores", indicó.
Estrada Oyuela encabezó la delegación de su país que participó en Buenos Aires en la novena reunión del Grupo Técnico de Alto Nivel creado por la Argentina y Uruguay para evaluar el impacto ambiental de la instalación de las plantas de celulosa.
Al término del encuentro, el diplomático confirmó que el gobierno argentino ha presentado una "disidencia" ante el uruguayo por haber iniciado, sin autorización, la construcción de un puerto sobre las costas del río Uruguay.
Explicó que las obras portuarias, cuya concesión fue otorgada a la firma Botnia, deben contar con la aprobación de ambos países, según un tratado bilateral suscrito en 1975.
