En medio de las críticas

Postergan la discusión de un polémico proyecto


Al oficialismo no le alcanzó el número para convertir en ley mañana la cuestionada reformulación del Consejo de la Magistratura y debió dejarla para más adelante. Mientras tanto, el senador Rubén Giustiniani fue restituido en la comisión del Senado donde, sobre el mismo tema, había dictaminado en contra. Y Alberto Fernández brindó explicaciones acerca de sus dichos sobre los medios.

Por Viviana Mariño (CMI)/El Litoral

Con un escenario político complicado para impulsar la aprobación del controvertido proyecto de reforma del Consejo de la Magistratura, el kirchnerismo decidió finalmente ayer levantar la última sesión del período de extraordinarias convocada para mañana en la Cámara de Diputados.

La decisión fue adoptada después de una jornada de consultas que incluyó una reunión en la Casa Rosada entre el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, el presidente de la Cámara baja, Alberto Balestrini, y el titular de la kirchnerista bancada del Frente para la Victoria, Agustín Rossi.

El gobierno, confiaron fuentes parlamentarias, decidió evitar nuevos costos políticos como el que significó la polémica aprobación de la prórroga de la Emergencia Económica por un nuevo año sin dar posibilidad de debate en el recinto a la oposición.

La estrategia parlamentaria fue ayer un tema de discusión central en los despachos de la Casa Rosada pese a la decisión del presidente Néstor Kirchner de permanecer hasta hoy en la villa turística de El Calafate.

Kirchner viajó a Río Gallegos el jueves pasado y, tras la celebración de las fiestas navideñas, se trasladó con la primera dama, Cristina Fernández, sus hijos y un reducido grupo de colaboradores, hasta El Calafate.

La posibilidad de propiciar el debate por el Consejo había comenzado a desdibujarse por la mañana cuando fuentes de la conducción del bloque kirchnerista advirtieron que resultaba "un poco difícil" que el oficialismo pudiera imponer la discusión sobre tablas de la iniciativa.

Con dictamen

Levantada la sesión, el oficialismo intentará que la comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara baja emita dictamen favorable mañana. Ese trámite permitirá que la iniciativa sea discutida a mediados de enero o febrero en el recinto sin requerir de mayoría especial.

La fecha definitiva de tratamiento dependerá de la decisión del Ejecutivo de enviar o no una nueva prórroga del período de sesiones extraordinarias. "Todavía no se resolvió el cronograma parlamentario", señalaron fuentes oficiales.

Junto con la reforma en la integración del Consejo, también quedará postergado el debate parlamentario de las iniciativas vinculadas con el régimen de capitalización de pymes y a la creación de Arsat (Empresa Argentina de Soluciones Satelitales).

Aunque la Casa Rosada asumió con protagonismo la defensa del proyecto de reforma del Consejo de la Magistratura, en el gobierno decidieron levantar la sesión después de evaluar que el Congreso ya cumplió con creces los objetivos planteados para el período de extraordinarias.

Ese balance contabiliza la aprobación, en apenas 48 horas, del decreto que habilita el uso de reservas del Banco Central para cancelar la deuda con el FMI, y las prórrogas de la emergencia pública y de un paquete de impuestos que representan, en conjunto, el 40 por ciento de la actual recaudación tributaria.

Más prolijo

El titular del bloque Frente para la Victoria de Diputados, Agustín Rossi, explicó hoy que la decisión de postergar el tratamiento del proyecto de modificación del Consejo de la Magistratura obedeció a que era un tema "que no tenía urgencia" y a evitar un tratamiento "sobre tablas" de la iniciativa, que implica "un esfuerzo adicional". "El tema no tenía la urgencia que tenían otros, como por ejemplo la Emergencia Económica", aseveró el legislador, quien aseguró que le parecía "mucho más ordenado y prolijo cumplir con todos los pasos reglamentarios de las sesiones".