El bonaerense Juan Ignacio Chela logró el acceso a los octavos de final del Abierto de Australia, primer certamen de Grand Slam del año que reparte 19 millones de dólares en premios, luego de superar con facilidad al belga Kristof Vliegen en sets corridos y lograr así por primera vez en su carrera llegar a la segunda semana de este torneo oceánico, en el que dos veces había llegado a la tercera vuelta (2001 y 2005) y en la misma cantidad de oportunidades había sido eliminado por el grandísimo Pete Sampras (en 2001 y 2002).

Chela venció al belga con parciales de 6-1, 6-4 y 6-4 y así logró superar un momento delicado, como es el hecho de volver a cargar pilas luego de un triunfo estresante, complicado y extenuante como el que obtuvo el jueves por la mañana argentina ante el australiano Lleyton Hewitt, en cuatro sets. Ahora, el "Flaco" de Ciudad Evita deberá afrontar un duelo muy difícil ante el alemán Nicolas Kiefer, vencedor en tercera vuelta del español Juan Carlos Ferrero por 6-3, 6-2, 5-7 y 6-2. De esta manera, el germano accede nuevamente a la cuarta vuelta luego de seis años (cuando cayó en cuartos de final ante el sueco Magnus Norman), luego de lo cual perdió una vez en segunda instancia, en otra no se presentó y las tres restantes en la jornada inicial.

El historial marca que el europeo se quedó con el único enfrentamiento con Chela, en Long Island 2003, con lo cual el argentino buscará, además, emparejar la cuenta personal.

El santafesino Guillermo Coria fue una sombra de lo que venía siendo en el certamen, es decir, un reflejo de un jugador sin precisión, potencia y profundidad, y quedó eliminado del Abierto de Australia por el francés Sebastien Grosjean, que para nada tuvo una actuación brillante pero que aprovechó todas las falencias del argentino, que cometió 23 dobles faltas y 48 errores no forzados, además de conectar solamente 15 winners y ningún ace.

Como resultado de esa paupérrima actuación del "Mago" de Rufino, se dio el marcador final ante el vigesimoquinto preclasificado, quien se llevó el triunfo con parciales de 6-2, 6-2, 3-6 y 6-4, en dos horas y 52 minutos de un partido disputado en condiciones no aptas para el deporte, ya que la temperatura en el estadio superó los 35 grados con una creciente humedad.

"Estaba con muchas ganas en este partido. La verdad es que hacía mucho calor, me costaba estar activo y moverme, pero creo que lo fundamental fueron mis fallos con el saque. Si hubiera sacado bien, el resultado hubiese sido otro. No sé si habría ganado, pero el partido hubiese sido más peleado", reconoció resignado Coria. Pero también agregó que "a nadie le gusta perder, especialmente como se dio el partido porque tuve posibilidades a pesar de haber sacado mal. Creo que fue el partido en el que el saque fue peor. Puse ganas, garra, hice todo lo posible por dar vuelta el resultado pero no alcanzó, y ahora hay que seguir trabajando", concluyó.

En la jornada del sábado se produjo la presentación de otros tenistas nacionales en los diferentes courts del Melbourne Park con buenas noticias.

En la llave de dobles femenino, la dupla campeona de Australia en 2004, compuesta por la pergaminense Paola Suárez y la española Virginia Ruano Pascual (cuartas preclasificadas), superó al dúo estadounidense integrado por Jill Craybas y Meilen Tu con parciales de 5-7, 6-4 y 6-3. En la tercera vuelta deberán medirse con una pareja muy complicada, como es la decimocuarta favorita que forman la rusa Svetlana Kuznetsova y la francesa Amelie Mauresmo.

En tanto, la tigrense Gisela Dulko, en dupla con la rusa Maria Kirilenko (probablemente el dúo físicamente más atractivo del campeonato), décimas cabezas de serie, vencieron a las australianas Monique Adamczak y Christina Horiatopoulos con marcador final de 6-3 y 6-2 y en octavos de final se medirán con el sexto dúo del cuadro, que integran la eslovaca Daniel Hantuchova y la japonesa Ai Sugiyama.