A donde nunca fue nadie antes
La Nasa cosecha información estelar y ahora va a Plutón
El New Horizons deberá llegar al planeta más alejado del sol antes de 2020. La comunidad científica sigue investigando el origen del sistema solar.

AFP/EFE

Cabo Cañaveral, EE.UU.- En su afán por avanzar en la investigación sobre el origen del cosmos, la Nasa lanzó el jueves pasado la sonda New Horizons hacia el lejano e inexplorado Plutón, tras recibir con éxito a su similar Stardust, que luego de siete años de viaje estelar regresó a la Tierra con una preciosa muestra de polvo de estrellas y de cometas.

La agencia espacial estadounidense lanzó el cohete que transporta la sonda New Horizons hacia Plutón luego de dos días de postergaciones, debido a inclemencias del tiempo y problemas técnicos.

La sonda se separó del cohete Atlas V-551 como estaba previsto, 42 minutos después del lanzamiento desde Cabo Cañaveral (Florida, sudeste), que tuvo lugar a las 19H00 GMT.

Tras separarse del cohete lanzador, New Horizons se alejó de la Tierra a una velocidad récord de unos 50.000 km por hora, casi 50 veces la velocidad del sonido.

Con un peso de 454 kg y el tamaño de un gran piano, New Horizons, dotada de siete instrumentos científicos, debe llegar cerca de Plutón a mediados de 2015, tras un periplo de 4.800 millones de km.

Recorrido

Si el lanzamiento se hubiera efectuado después del 27 de enero, el viaje de la sonda se habría alargado algunos años, debido a que New Horizons necesita aproximarse en febrero de 2007 a la órbita de Júpiter, para así beneficiarse de su fuerza de gravedad, después de lo cual podrá viajar a 75.600 km por hora.

Los científicos de la misión explicaron que es absolutamente necesario que la sonda llegue a Plutón antes de 2020. Después de esa fecha, el planeta se encontrará demasiado alejado del Sol, lo que transformará su atmósfera en hielo y nieve.

El noveno planeta del sistema solar, y el más pequeño y alejado del Sol, es aún un enigma, 75 años después de su descubrimiento, ya que nunca ha sido explorado por una sonda espacial.

"New Horizons irá allí donde nunca se fue antes, a la frontera de la ciencia planetaria", se entusiasmó Hal Weaver, responsable científico de la misión, que tiene un costo de unos 700 millones de dólares.

Si ésta tiene éxito, la sonda volverá a la Tierra dentro de nueve años, con información sobre la atmósfera y geología de Plutón, fotografías del planeta y su gran luna Caronte, y del cercano cinturón de Kuiper.

Prioridad

Esa exploración -afirma la comunidad astronómica- es una de las principales prioridades de la conquista espacial para intentar avanzar en la comprensión de los orígenes del sistema solar, surgido hace 4.500 millones de años.

Con ese mismo objetivo había sido lanzada hace siete años la sonda Stardust, cuya cápsula regresó el domingo con éxito a la Tierra, luego de recorrer 4.630 millones de kilómetros, más de 10.000 veces la distancia de la Tierra a la Luna.

Su meta fue recoger polvo de estrellas y de cometas, una carga preciosa que puede ofrecer información física y química sobre la formación de los planetas y que, sin embargo, podría guardarse en una cucharita de café.

Las muestras fueron llevadas a un laboratorio especial donde serán analizadas, algo que podría tomarles a los científicos 10 años de estudios: es "como si se intentara encontrar 45 hormigas en una cancha de fútbol examinando 1,6 millones de cuadrados de tierra de 5 cm2", resumió un investigador.