El presidente del Partido Socialista, Rubén Giustiniani, sostuvo anoche que el gobierno nacional "debe entender que para colaborar en el objetivo de sacar adelante el país no es necesario hacerse kirchneristas".
El dirigente salió así al cruce de las declaraciones del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, quien acusó a "algunos socialistas" de "mirarse más el ombligo que el país" al cuestionar la decisión de Héctor Polino de rechazar la oferta de sumarse al gobierno.
"A pesar de los agravios, seguiremos acercando nuestras propuestas desde una oposición constructiva para que se produzca la redistribución del ingreso todavía pendiente", destacó, en el cierre de la II Conferencia Nacional Política, del Partido Socialista (PS).
Dicha conferencia, al decir de sus organizadores, contó con la presencia de unos 1.800 delegados y asistieron invitados especiales como el comunista Carlos Heller, titular del Banco Credicoop; el justicialista Emilio Martínez Garbino, diputado nacional por Entre Ríos; y la escritora Beatriz Sarlo.
Con un discurso de fuerte tono opositor, Giustiniani acusó al gobierno nacional de "terrorismo político" por el hecho de haber ofrecido un cargo al ex diputado nacional Héctor Polino, quien lo rechazó por la oposición que mostró la conducción partidaria, a pesar de que él estaba dispuesto a aceptarlo con el apoyo del actual diputado nacional Hermes Binner, ex intendente socialista de Rosario.
La conferencia se desarrolló en el teatro Avenida de la ciudad de Buenos Aires, y el tema central terminó siendo el rechazo a que Polino se hiciera cargo de una función que le fuera ofrecida como titular de la Secretaría de Medio Ambiente de la Nación.
El encuentro había comenzado con un respaldo a la decisión del Comité Ejecutivo Nacional del PS de rechazar la oferta a Polino, lo que mereció una opinión crítica por parte del jefe del Gabinete Nacional, Alberto Fernández, en el sentido de que "algunos socialistas miran mucho más su ombligo que al país".
"Nos agraviaron"
Giustiniani le respondió: "Hoy nos agraviaron. No le vamos a contestar con agravios. El gobierno nacional debe entender que para colaborar en sacar adelante el país no es necesario hacerse kirchneristas. A pesar de los agravios, seguiremos acercando nuestras propuestas desde una oposición constructiva para que se produzca la redistribución del ingreso todavía pendiente", subrayó.
Sin embargo, en materia de agravios la respuesta corrió por cuenta de Sarlo, la que sostuvo que estaba muy emocionada con la respuesta que el PS le dio al gobierno y desde el escenario del teatro enfatizó "el acto del presidente fue de terrorismo político".
(Kirchner) "Puso al Partido entre la espada y la pared. Está desorganizando al sistema de partidos políticos en la Argentina. Estamos frente a un gobierno que busca la hegemonía ideológica, que destruye la identificación política de los partidos. Eso se intentó con el Partido Socialista y el partido dijo no", dijo la escritora de una larga tradición política antiperonista.
