Los presidentes del Mercosur se reúnen en Córdoba
Kirchner admitió errores pero instó a profundizar la unión
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En el discurso de apertura formal, el mandatario instó a la solidaridad entre los miembros del bloque. Su par uruguayo coló el tema de las papeleras; aludió a Argentina como el "hermano" país y dijo que el diálogo entre ambas naciones va a seguir siempre.

Al cierre de esta edición, se estaba llevando a cabo la apertura oficial de la reunión de los presidentes de los países signatarios del Mercosur y de las naciones asociadas, acto en el cual Néstor Kirchner realizó un llamado a profundizar el proceso de integración del Mercosur, aunque reconoció que persisten "diferencias" dentro del mismo, que sólo podrán ser superadas con la "solidaridad" entre sus miembros.

"No se trata de ver qué país es más vivo que otro. La solidaridad debe ser la bandera que rija nuestras acciones", expresó el mandatario. Asimismo, instó a "encontrar los caminos para que esas solidaridades sean efectivas; si no, será muy difícil consolidar" el bloque.

Paralelamente, afirmó que "la opción estratégica debe ser profundizar y extender" el Mercosur, lo que requiere de "un proceso complejo", y reconoció que "las tensiones y divergencias son resultado de la necesidad de atender todos los puntos de vista.

"Las asimetrías merecen ser tenidas en cuenta. Se deben contemplar salvaguardas y compensaciones", dijo el jefe de Estado, y añadió que "ningún problema es tan grande que no pueda ser vencido con esfuerzo y voluntad política de integración".

En otro tramo de su discurso, Kirchner habló de la necesidad de "estar integrados al mundo, pero no de cualquier manera", sino con condiciones "dignas y equitativas". En ese sentido, exhortó a una "integración equitativa para las partes, atractiva para todos y que no genere mayor dependencia".

Las diferencias

Al hablar de las diferencias que persisten dentro del bloque, el jefe de Estado argentino sostuvo que advierte "muestras de que estamos avanzando, aunque no tanto en logros puntuales ni en dificultades resueltas", pero consideró "natural que existan resistencias".

Para Kirchner, el éxito del Mercosur "no se puede medir por actitudes coyunturales; no se puede decir que fracasa porque dos países o tres tenemos diferencias circunstanciales por la interpretación de distintos temas".

Criticó, además, a "aquellos que no creen en la integración, que ven xenofobia, o tratan, de cualquier manera o forma, de que estos procesos no den resultado".

Entre los avances de la región, el primer mandatario destacó la inclusión de Venezuela como miembro pleno, lo que contribuirá "a sumar a la agenda del bloque el debate importante sobre los desafíos pendientes para lograr la integración y beneficio de los pueblos".

Finalmente, Kirchner propuso que -en el marco de la cumbre- los presidentes suscriban un documento que llame a "la paz, la convivencia y la autodeterminación de los pueblos", en el marco del conflicto de Medio Oriente.

"Hacemos un llamado humilde, con fuerza, con solidaridad, a que rápidamente se encuentren los caminos de la paz y se termine la muerte de cientos hermanos en este conflicto, que se terminen las agresiones mutuas, que no haya invasiones", exhortó Kirchner.

En la última parte de su discurso, le habló directamente a su par brasileño Luiz Inacio "Lula" Da Silva, quien a partir de hoy quedará al frente de la presidencia pro témpore del bloque, hasta el momento ejercida por el mandatario argentino. "Sabemos que hará una gran gestión. (`Lula') es un gran presidente, un gran hombre de Latinoamérica y Sudamérica, por lo que lo acompañaremos para que su tarea sea superadora de la anterior", aseveró.

Papeleras

A su turno, el jefe uruguayo Tabaré Vázquez reveló en su discurso haber "acordado" con Kirchner seguir el diálogo siempre.

"Lo hablamos con el presidente; no puede ser que entre hermanos que se entienden, se quieren y se respetan resuelvan terceros", enfatizó el mandatario, en obvia alusión al juicio que se dirime en el tribunal de La Haya.

"El río Uruguay nos debe unir y no separar", agregó, al tiempo que solicitó "el beneficio de la duda" en el conflicto, puesto que a Uruguay le "importan la salud y la vida de su gente; ocupa el tercer lugar en el mundo en cuanto a la protección ambiental", enfatizó.

"El camino del diálogo nunca estuvo cerrado y no lo va a estar. Me voy de esta cumbre con alegría y esperanza", concluyó Vázquez.

Al cierre de la presente edición, seguían emitiendo sus discursos los demás presidentes que asisten a la XXX Cumbre del Mercosur.

Reuniones a solas y acuerdos energéticos

Antes de que comenzara formalmente a sesionar la Cumbre, Néstor Kirchner se reunió con su par uruguayo, Tabaré Vázquez, con quien no habló de las pasteras. En cambio, avanzó en cuestiones energéticas con Michelle Bachelet y en especial con Hugo Chávez, con quien se acordó que Enarsa participará en la la exploración petrolera de la franja del Orinoco.

Con el mandatario uruguayo Kirchner mantuvo un contacto breve, el primero después de que se conociera el fallo de la Corte de La Haya que dio el primer revés a la Argentina en la disputa por las pasteras.

El ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, dijo que los mandatarios "no hablaron de papeleras", sino de un acuerdo energético. En declaraciones a la prensa, De Vido aseguró que en la sorpresiva reunión se habló sobre un acuerdo firmado con Venezuela también referido a la exploración de combustibles entre Enarsa y Pdvsa, a la que se sumará la uruguaya Ancap.

Según ese entendimiento, Enarsa buscará capitales para participar junto con los uruguayos (entre ambos aportarán 50% de la inversión) y los venezolanos en la exploración y explotación de la cuenca del Orinoco. De Vido dejó entrever que eso permitirá al país despejar incertidumbres sobre reservas de hidrocarburos o escasez de gasoil.

"El acuerdo permitirá a la Argentina incrementar en un 50 por ciento su provisión de petróleo en el mercado local", explicó Julio de Vido. El ministro detalló que la empresa venezolana Pdvsa es dueña del 51 por ciento del yacimiento.

Kirchner también se reunió esa mañana con la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, en medio de las tensas relaciones con el país trasandino. El encuentro había sido pedido por la presidenta chilena tras las medidas tomadas por el gobierno argentino de subir el precio del gas que vende al país vecino y de los combustibles en las zonas de frontera. La presidenta chilena aseguró que llevaría los dos temas que más la preocupan en ese ámbito a la cumbre.

También fue De Vido uno de los responsables de transmitir a la prensa los alcances del encuentro; sobre el particular, el ministro aseguró que "no hay ninguna revisión" a la disposición oficial de poner precios diferenciales a combustibles que venden estaciones de servicio fronterizas, a pesar del malestar que causó la medida en Chile. "No tenemos por qué cambiarla. La Secretaría de Energía está autorizada a tomar disposiciones con racionalidad", dijo al respecto.

El ministro de Planificación remarcó en cambio, respecto del aumento del precio del gas a Chile, que podría haber compensaciones arancelarias, aunque no ofreció detalles al respecto.

Tras ese encuentro, Kirchner recibió al mandatario de Boliva, Evo Morales, se reunió también con Chávez. Luego encabezará el debate de todos los presidentes del Mercosur, países asociados e invitados.

Pueblos

El líder cubano Fidel Castro confirmó que esta tarde participará del acto de la Cumbre de los Pueblos, en el campus universitario, en el que será orador junto a su par venezolano, Hugo Chávez, y el boliviano Evo Morales. Castro ratificó su presencia durante un breve e informal diálogo con la prensa en el predio ferial, donde se desarrolla el Plenario de Presidentes del Mercosur y Estados Asociados, y también mantuvo un contrapunto con un periodista que le preguntó sobre el caso de la médica cubana Hilda Molina y la "transición" del poder en su país. "Tú eres cubano?", le preguntó Fidel al cronista, a quien también inquirió: "¿Quién te paga?".